Reseña: Little Devils

Reseña: Little Devils

A todos nos gustan las chanzas y los desafíos. En este juego los participantes intentarán cargar a sus rivales con puntos negativos mediante unos pequeños diablillos presentes en las cartas. Desgraciadamente, será difícil escapar indemne en todas las rondas, por lo que también acumularemos puntos negativos.

Así se nos presenta este Little Devils, un juego diseñado por Michael Feldkötter (Via Appia o Montego Bay). El juego se publicó en 2012 de la mano de White Goblin Games en una edición multilenguaje (inglés, francés, alemán, italiano y holandés). Stronghold Games también lanzaría una edición exclusivamente en inglés. De las ilustraciones se encarga Dennis Lohausen, quien ya ha demostrado su buen hacer en juegos como Helios, Glass Road o Terra Mystica.

Reseña: Pi Mal Pflaumen

Reseña: Pi Mal Pflaumen

Los Siglos XVII y XVIII fueron tiempos importantes para la ciencia. Dos personalidades importantes de la época fueron Leonard Euler y Maria Sibylla Merian (quienes mantenían una relación de parentesco). Euler fue un famoso matemático que popularizó el uso del número pi. Maria no sólo fue un naturalista y exploradora, sino también artista. Su nombre es sinónimo de estilo de interpretación detallada de la naturaleza, como sus obras sobre la metamorfosis de las orugas en mariposas. Pi Mal Pflaumen es un juego de palabras con la expresión «Pi Mal Daumen«, que significa «Regla del Pulgar», solo que en esta ocasión se tratará de frutas. Los jugadores formarán bazas de las que tomarán frutas con los que formar conjuntos.

Así se nos presenta este Pi Mal Pflaumen, un juego diseñado por Matthias Cramer, autor de otros famosos títulos como Glen More, LancasterKraftwagen. El juego ha sido publicado en 2015 por Pegasus Spiele en una edición con inglés y alemán como idiomas incluidos. De las ilustraciones se encarga Dennis Lohausen, cuyo estilo recordaréis de juegos como Los Viajes de Marco Polo, Terra Mystica o Fields of Arle.

Reseña: Tichu

Reseña: Tichu

Cuando a uno le da por recorrerse el ranking de la BGG (eso que hacemos todos de vez en cuando), siempre acabamos deteniéndonos en un caso curioso. Uno de esos juegos que destacan por ser tan distinto del resto de títulos que lo emparedan, pues no deja de ser un juego de cartas que, prácticamente, se juega con una baraja de naipes.

Si amigos, me estoy refiriendo a esa maravilla llamada Tichu. Y aunque pudiese parecer que se trata de un juego tradicional chino con siglos de antigüedad, en realidad obra del diseñador suizo Urs Hostettler, y vio la luz en 1991.