Reseña: Se Vende

Reseña: Se Vende

Si crees que es tu oportunidad para ser el propietario de una ciudad, de sus calles más comerciales o sus edificios más emblemáticos, ¡olvídate! En Se Vende puedes ser propietario de una caravana, una tienda de campaña, una cabaña o un iglú… y esto no está nada mal, ¿imaginas ser el dueño de un basurero o de una alcantarilla? No te asustes, también hay castillos medievales en venta. Tu reto es pujar por estas propiedades, conseguirlas al menor precio y venderlas a un precio mucho mayor.

Así se nos presenta este Se Vende (For Sale), diseñado por el gran Stefan Dorra (Medina, Kreta o Intrigue). La primera edición del juego fue publicada en 1997 de la mano de Ravensburger. Ha tenido ya unas cuantas reediciones con lavado de cara incluido, pasando por editoriales como F.X. Schmid, Überplay, Gryphon o Iello. Por supuesto, artistas muchos. De la edición de Iello se encarga Catell Ruz (Master Fox);de la de Griphon, Alvin Madden (High Society o The Bridges of Shangri-La); o de la de Ravensburger, Klaus Wilinski (Can’t Stop o Big Shot).

Reseña: Horse Fever

Reseña: Horse Fever

Allá por el año 1928, el mayor apostador en las carreras de caballos de la época, apodado como «El Jefe», decidió construir una nueva pista de carreras en la ciudad de Horseburg para ayudar a coronar a su sucesor. Los mejores corredores de apuestas del mundo vinieron de todos los rincones para aceptar el reto, poniendo en juego su honor para competir por el título de «Mejor Apostador del Mundo».

Así se nos presenta este Horse Fever, un juego diseñado por Lorenzo Silva y Lorenzo Tucci Sorrentino, autores de otros títulos como Steam Park o Dungeon Fighter (ambos junto a Aureliano Buonfino). El juego vio la luz en 2009 gracias a través de Cranio Creations en una edición multilenguaje, incluyendo inglés, alemán, francés e italiano. De las ilustraciones se encarga Giulia Ghigini, quien ya se encargase del arte de juegos como SheeplandEscape from the Aliens in Outer Space.

Reseña: Keyflower

Reseña: Keyflower

Keyflower se desarrolla a lo largo de las cuatro estaciones de un año. Los jugadores competirán por ampliar y mejorar sus respectivas aldeas, presentando a los jugadores diferentes desafíos y cada juego será diferente debido a la mezcla de losetas de villa que varía en cada partida. Los jugadores deberán estar alerta de las mejores oportunidades de aprovechar sus diferentes recursos, transportes y capacidad de mejora, habilidades y trabajadores.

Asia se nos presenta este Keyflower, un diseño de Sebastian Bleasdale (Black Fleet u On the Underground) y Richard Breese (Reef Encounter o Inhabit the Earth). El juego fue publicado en 2012 por HUCH! & friends/R&D Game. De las ilustraciones se encargan Juliet Breese (Keythedral o Aladdin’s Dragons), Jo Breese y Gemma Tegelaers (Mai-Star o Massilia).

Reseña: Tinners’ Trail

Reseña: Tinners’ Trail

Tinners’ Trail está ambientado en Cornwall, Gran Bretaña, en el s. XIX, y se centra en la minería de estaño y cobre que floreció por entonces. Asumes el papel de un empresario minero, cuyo objetivo es crear minas en las áreas más ricas en mineral. Tu mayor problema es el agua que debe extraerse de las minas para poder trabajar. Cuanto más profundo excaves, más agua deberás desaguar. Por suerte, por aquel entonces se estaban desarrollando las bombas de achique de vapor, así como los buques y trenes de vapor necesarios para transportar el carbón que dichas bombas necesitaban para funcionar. También puedes excavar túneles de drenaje con los que desaguar el agua y descubrir nuevas vetas de mineral.

Así se nos presenta este Tinners’ Trail, un diseño de Martin Wallace, responsable de obras como Age of Steam, Brass o London. El juego fue publicado en 2008 por Treefrog, teniendo una reedición posterior, con cambio de look, de la mano de JKLM Games. De las ilustraciones de esa primera edición se encargó Peter Dennis (Brass, Age of Steam o London), mientras que la segunda fue responsabilidad de Andreas Resch (Istanbul, Rialto o Il Vecchio).

Reseña: ¡No Gracias!

Reseña: ¡No Gracias!

Una carta en la mesa y un buen montón de monedas sobre ésta. Estás deseando cogerlas, pero confías en que, si pasas, tus ganancias serán mayores. Sin embargo, tienes miedo de que tu contrincante se te adelante. Le miras a la cara y detectas un ligero tic en su ojo izquierdo. Sonríes para tus adentros y, con fingido desinterés, pronuncias: “¡No Gracias!”. ¿Juegas acaso una partida de póquer rodeado de inquietantes forajidos? ¡Qué va! El Salvaje Oeste es Disneylandia en comparación.

Así se nos presenta ¡No Gracias!, un pequeño filler diseñado por Thorsten Gimmler (autor de otros juegos como Aton o Odin’s Ravens). El juego fue publicado por primera vez en 2004 de la mano de Amigo, siendo reeditado una gran cantidad de veces por diversas editoriales de renombre, como Mayfair, Z-Man, Gigamic o 999 Games. Del arte se han encargado dos ilustradores. Las primeras versiones corrieron a cargo de Oliver Freudenreich (Goa, Santiago, Abluxxen), mientras que las más actuales son responsabilidad de Atelier Löwentor (Bohnanza).

Reseña: Manila

Reseña: Manila

Estamos en 1821; hace ya 250 años que las Filipinas se hallan bajo dominio español. Pero son tiempos difíciles; a causa de la guerra de independencia en Nueva España, hace seis años que la gran ruta comercial entre Manila y Acapulco, el famoso Galeón de Manila, ha quedado interrumpida. Mientras, los mercaderes locales, burlando a las autoridades coloniales, se afanan en establecer precarias rutas marítimas con los archipiélagos vecinos y con el continente. Frágiles chalanas de bambú, repletas de nuez moscada, seda, jade y ginseng se escabullen hacia Manila. Pero el éxito no está asegurado: vías de agua, capitanes ineptos e incluso piratas pueden hacer fracasar los mejores planes. Es por ello que, en el mercado negro, los precios se disparan, lo que hace aún más atractiva esta arriesgada empresa, y obliga a los mercaderes a usar compinches para garantizar sus mercancías, sobornar a los prácticos del puerto y contratar dudosos seguros; ¡los menos escrupulosos incluso se atreven a reclutar piratas!

Así se nos presenta este Manila, un juego diseñado por Franz-Benno Delonge, autor de, entre otros, Container, Big City o TransAmerica. El juego salió al mercado por primera vez en 2005 publicado por la editorial Zoch Verlag (en inglés y alemán). También existen versiones en polaco por Egmont Polska, francés por Gigamic, chino por Swan Panasia u holandés por 999 Games. De las ilustraciones se encarga Victor Boden, un clásico de los juegos de Zoch, responsable de juegos como Tobago (aquí su tochorreseña), Niagara, Villa Paletti o Mangrovia.