Reseña: Vienna

Reseña: Vienna

Acabas de llegar a la Viena del siglo XIX, una gran ciudad que maravilla a los visitantes con sus muchas posibilidades. Llega el momento de tomar decisiones importantes. ¿Parar en los lugares que aseguren una mayor cantidad de puntos? ¿O mejor esperar y ganar influencia sobre las personalidades importantes de la ciudad? Todo esto sin olvidar los planes del resto de jugadores. Quien sea capaz de leer las intenciones de sus rivales y escoja sabiamente sus acciones se proclamará vencedor.

Así se nos presenta este Vienna, un diseño de Johannes Schmidauer-König, responsable de otros títulos como Portal of Heroes, Cornwall o Team Play. El juego fue publicado en 2015 por la editorial alemana Schmidt Spiele en una edición multilenguaje. De las ilustraciones se encarga el siempre espectacular Michael Menzel, responsable del aspecto de otros juegos como Rokoko, Shogun o Stone Age.

Reseña: Shogun

Reseña: Shogun

Como señores feudales en el Japón del siglo XVI, los jugadores intentan asegurar la supremacía para su clan y ser un poderoso daimyo para terminar siendo un Shogun. Para conseguirlo es necesario controlar el mayor número posible de provincias, y además ampliar su propio feudo. Esto se logra construyendo castillos, templos y teatros. A lo largo de dos duros años, los jugadores lucharán por el control de dichas provincias, teniendo que cuidar de los habitantes de las mismas para evitar revueltas, aunque muchas veces será inevitable.

Así se nos presenta este Shogun, una reimplementación de Wallestein (en su primera edición), ambos diseños de Dirk Henn (Alhambra, Metro, Rosenkönig). El juego se publicó en 2006 por la editorial Queen Games. Curiosamente, Shogun sería reimplementado a su vez por la segunda edición de Wallestein. De las ilustraciones se encarga el genial Michael Menzel (Aqua Romana, Las Leyendas de Andor o Rokoko).

Reseña: Cable Car

Reseña: Cable Car

A principios del siglo XX, San Francisco vive una actividad frenética en las calles, en las que destacan las líneas de tranvías. Los jugadores, como accionistas de las distintas compañías de tranvía, podrán ampliar sus líneas y comprar más acciones. Por cada línea construida completamente, la compañía propietaria consigue puntos de beneficios. ¿Quién tendrá las acciones más valiosas para ganar la partida?

Así se nos presenta este Cable Car, un diseño del gran Dirk Henn y reimplementación de un juego anterior suyo, Metro, sin olvidar otras obras suyas como Alhambra, Shogun o Rosenkönig. Publicado por Queen Games (como no podía ser de otra forma) en 2009 y con las ilustraciones del gran Michael Menzel (Rokoko, Stone Age o The Speicherstadt).

Reseña: Primera Clase

Reseña: Primera Clase

En Primera clase te pondrás en la piel de un ambicioso empresario que espera competir codo con codo con Georges Nagelmackers, fundador y promotor del Orient Express. Al igual que él, intentarás atraer al mayor número de pasajeros adinerados para que tu compañía de trenes alcance un gran prestigio. Para ello, deberás disponer de unos cuantos vagones bien lujosos que permitan ofrecer el mejor viaje hasta la lejana Constantinopla. Durante la partida contarás con muchas opciones y caminos que podrán conducirte hasta la victoria. Incluso si sólo te dedicas a crear un tren que resulte atractivo, puede que las cosas te salgan bien. Pero cuidado: en el Orient Express no siempre viaja gente distinguida. ¡En algunos casos, es posible incluso que llegue a cometerse un asesinato!

Así se nos presenta este Primera Clase, el último diseño de Helmut Ohley (Trambahn, Russian Railroads o Poseidon, estos últimos junto a Leonhard Orgler). El juego fue publicado en 2016 por Hans im Glück en una edición en alemán, siendo publicado en paralelo por Z-Man Games (en inglés) y 999 Games (en holandés). De las ilustraciones se encarga el gran Michael Menzel (Stone Age, Shogun, Rococo o Bruges).

Primeras Impresiones: Santa Cruz

Primeras Impresiones: Santa Cruz

¡La isla de Santa Cruz ha sido descubierta! Ahora, los jugadores deberán asumir la ardua tarea de colonizarla, construyendo diversas estructuras a lo largo y ancho de la ínsula principal como de las periféricas.

Si metemos en la coctelera a una de las editoriales alemanas por excelencia como es Hans im Glück, a un autor con cierto nombre y algunos títulos importantes como Cassasola y un ilustrador de postín como Menzel, lo normal es producir un señor eurogame. Pero, como ya es sabido, no existe la receta del éxito, y Santa Cruz es un claro ejemplo.

Reseña: Asante

Reseña: Asante

“Asante” significa “gracias” en lengua suajili. Así se despiden de su clientela los entusiastas mercaderes en el corazón de África. Mediante el comercio de mercancías los jugadores tratarán de cerrar los tratos más beneficiosos para su pueblo. Para conseguir su objetivo, deberán cuidar sus relaciones sociales y así poder contar con el favor de la Matrona, la habilidad del Tallista o la sabiduría local del Barquero. Nunca estará de más soltar búfalos o gorilas para que siembren el caos en el poblado del adversario o visitar los lugares sagrados para hacerse con las ventajas que proporcionan sus poderes. La gran variedad y cantidad de cartas dotan al juego de una atmósfera exótica y consiguen que cada partida sea diferente.

Así se nos presenta este Asante, una reimplementación que Rüdiger Dorn desarrolla a partir de uno de sus juegos más conocidos, Jambo. Recordemos que el autor alemán es el responsable de grandes obras como Goa, Mercaderes de Génova o Louis XIV. El juego se publicó por primera vez en 2013 por Kosmos dentro de su línea para dos jugadores. De las ilustraciones se encarga el celebérrimo Michael Menzel (Las Leyendas de Andor, Viena o Bruges).