Reseña: El Diablo en la Botella

Reseña: El Diablo en la Botella

Robert Louis Stevenson escribió El diablo de la botella en una de las Islas de Samoa en 1891. En el relato el haitiano Keawe decide visitar otras tierras y parte a San Francisco. Allí queda prendado de una hermosa casa cuyo dueño, sin embargo, es un hombre infeliz y solitario. El dueño de la casa, tras enseñársela, le explica el motivo de su aflicción: es propietario de una extraña botella que encierra un demonio que concede deseos excepto el de alargar la vida. Pero poseer la botella tiene consecuencias: si el dueño de la botella muere sin venderla antes arderá en el infierno. Para venderla hay un requisito obligado: venderla por un precio más bajo y que el comprador conozca su secreto. En este punto empiezan las aventuras de Keawe y la botella…

Así se nos presenta El Diablo en la Botella, el relato del famoso escritor escocés en el que se inspira el juego de cartas que hoy nos ocupa, un diseño de Günter Cornett (Kahuna, ¡Pingüinos!). El juego fue publicado en 1995 por Bambus Spieleverlag en una versión en alemán. Posteriormente ha ido recibiendo diversas reediciones. De entre los muchos ilustradores que han trabajado con este diseño, destacaremos a los encargados de la última versión, Tuuli Hypén y Jere Kasanen, quienes ya se ocuparon de M.U.L.E. The Board Game o Dungeon Rush.

Reseña: Agamemnon

Reseña: Agamemnon

Agamenón, favorecido por el Destino. Agamenón, quien enojó a los dioses con su arrogancia. Agamenón, quien dirigió la guerra contra Troya. Las Cuerdas del Destino atan la voluntad de los hombres mortales, pero los dioses tienen un poco más de libertad… Los jugadores asumen el papel de dioses durante los acontecimientos de la Ilíada, afectando el movimiento de los ejércitos en las costas troyanas e influyendo sutilmente en el destino para decidir el resultado.

Así se nos presenta este Agamemnon, un diseño del gran Günter Cornett, conocido por ¡Pingüinos!, Kahuna o The Bottle Imp. El juego fue publicado en 2016 por Osprey Games en una edición en inglés. De las ilustraciones se encargan José Daniel Cabrera Peña (Dux Bellorum o Kill the King) y Rocío Espín Piñar, siendo esta su primera incursión en el mundo de los juegos de mesa.

Reseña: Kahuna

Reseña: Kahuna

Los jugadores representan a dos sumos sacerdotes, guardianes de la magia de Kahuna, que compiten para ver quien tiene más poder. Han seleccionado un pequeño archipiélago de dos islas de los Mares del Sur, las cuales intentarán unir mediante la construcción de puentes que enlacen las islas de dos en dos. El jugador que tenga la mayoría de los puentes de una isla tomará el control de la misma, colocando la piedra Kahuna de su color como símbolo de su poder sobre esa isla.

Así se nos presenta este Kahuna, un juego diseñado por Günter Cornett, responsable de otro famoso juego abstracto como es ¡Pingüinos! (junto a Alvydas Jakeliunas), aunque tiene otros títulos publicados como The Bottle Imp o Kanaloa. La primera edición fue publicada en 1997 por el propio Cornett a través de su editorial Bambus Spieleverlag, bajo el título de Arabana-Ikibiti. Al año siguiente sería publicado dentro de la serie para dos jugadores de Kosmos, llegando a alcanzar la nominación al Spiel des Jahres. De las ilustraciones se encarga Claus Stephan, con títulos de los que era responsable del arte como Exploradores o Rosenkönig.

Reseña: ¡Pingüinos!

Reseña: ¡Pingüinos!

Buenas a todos. Aquí os traigo una reseña de un juego en pequeño formato pero que esconde una gran joya dentro de el. Y la verdad es que yo no daba «un duro» por el. Lo compró mi novia, que en su día vio la edición de Devir y le llamó muchísimo la atención. Eh! Son pingüinos!!! Pero a mi es difícil «embaucarme» con una portada bonita y animales «cachondos». Así que me negaba en rotundo a comprarlo. Sobre todo por el precio, en torno a los 26 €, pues hay Eurogames importantes que cuestan mas o menos lo mismo y ofrecen muchísimo mas. Pero entonces, un día, dando una vuelta por mi querida Sevilla, entramos en una famosa tienda de comics y juegos y vimos la edición de Edge Entertainment, prácticamente de viaje, a un precio irrisorio de 11,95 €. Así que decidimos adquirirlo a ver que tal. La verdad es que fue un salto al vacío, yo que suelo navegar y navegar, leer mucho y comparar antes de elegir un nuevo titulo, accedí «prácticamente» a ciegas.

Y la sorpresa fue mayúscula…