Reseña: Ankh – Dioses de Egipto
Los antiguos egipcios adoraban a un extenso panteón de dioses, cada uno de los cuales dominaba diferentes aspectos de la vida cotidiana. Sin embargo, los tiempos están cambiando y el pueblo ha comenzado a adorar a un número cada vez menor de deidades, fusionando incluso a diferentes dioses y concentrando su admiración en sólo unos pocos. Paso a paso, se dirigen a una sociedad monoteísta y los pocos dioses que quedan, conscientes de que es un proceso irreversible, han iniciado una guerra para convertirse en el único ser divino al que los egipcios rindan culto. Uno será adorado. Los demás serán olvidados.
Así se nos presenta Ankh: Dioses de Egipto, un diseño de Eric M. Lang que completa la trilogía de mitologías del autor junto a Blood Rage y Rising Sun. El juego fue publicado por primera vez en 2021 por Cool Mini or Not en una versión en inglés tras una exitosa campaña de micromecenazgo. De las ilustraciones se encargan Nicolas Fructus (Kemet, Takenoko), Thierry Masson (Blood Rage, Earth Reborn) y Adrian Smith (Rising Sun, Cthulhu May Die).