Detalle Tablero

Reseña: Oxono

Introducción

Usa las piezas de tu oponente para lograr un golpe maestro en este sencillo y formidable juego de alineación donde no existen las diagonales.

Portada
Portada

Así se nos presenta Oxono, un diseño de Jeremy Partinico, responsable de Dictopia o Yoxii. Publicado por primera vez en 2024 por Cosmoludo en una versión multilenguaje (inglés, francés, alemán, holandés, portugués, español e italiano). Del diseño gráfico se encarga Tom Delahaye, responsable del aspecto de juegos como Mana o Kamon.

El juego es completamente independiente del idioma. Permite partidas a 2 jugadores, con una edad mínima sugerida de 8 años y una duración aproximada de 15 minutos. El precio de venta al público es de 25,90€. Para esta reseña se ha utilizado una copia de la versión multilenguaje de Cosmoludo, que la propia editorial nos ha cedido amablemente.

Contraportada
Contraportada

Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.



Contenido

Dentro de una caja de cartón de una pieza (tapa con solapa magnética), de dimensiones 27×18×4 cm. (caja rectangular mediana como todas las de la serie de juegos de Cosmoludo), encontramos los siguientes elementos:

  • Tablero (de cartón)
  • 32 Piezas (16 de cada color) (de madera)
  • 2 Tótems (de madera)
  • Reglamento
Contenido
Contenido

Mecánica

Oxono es un abstracto para dos jugadores en el que cada jugador dispondrá de 16 piezas, ocho con una O y ocho con una X con el objetivo de ser el primero en formar una línea de cuatro piezas en horizontal o vertical de su color o, en su defecto, que contengan el mismo símbolo. Para colocar estas piezas encontraremos en el tablero de casillas cuadriculadas dos tótems, uno con una O y otro con una X. En cada turno, el jugador activo desplazará en línea recta uno de estos tótems sin saltar por encima de piezas tantas casillas como crea conveniente. Tras esto, el jugador podrá colocar una pieza de su color del símbolo correspondiente en una casilla libre ortogonalmente adyacente al tótem. Si un tótem está completamente encerrado sí podrá saltar. Y si salta a una casilla completamente encerrada, podrá colocar su pieza en cualquier casilla del tablero.


Conceptos Básicos

Empecemos por el Tablero. Este presenta una cuadricula de seis casillas por lado. En dos de las cuatro casillas centrales encontraremos dos puntos que sirven como marca para los tótem.

Tablero
Tablero

Estos Tótems serán las piezas que los jugadores podrán desplazar sobre las casillas del tablero mediante movimientos rectilíneos a través de casillas libres. Cada tótem muestra uno símbolo: una X y una O.

Tótems
Tótems

Cada jugador dispondrá de un conjunto de dieciséis Piezas de su color, ocho con un símbolo X y ocho con un símbolo O. Al desplazar uno de los tótems el jugador podrá colocar una ficha de símbolo coincidente. La idea es intentar conformar una línea de cuatro piezas de su color o del mismo símbolo (que puede contener piezas del rival).

Fichas
Fichas

Con esto tenemos suficiente.


Preparación de la Partida

  1. Se coloca el tablero entre ambos jugadores.
  2. Se colocan los dos tótems en las casillas iniciales.
  3. Cada jugador toma las 16 piezas de uno de los colores.
  4. Finalmente se escoge aleatoriamente al jugador inicial.

¡Ya podemos comenzar!

Partida Preparada
Partida Preparada

Desarrollo de la Partida

Una partida a Oxono se desarrolla a lo largo de un máximo de treinta y dos turnos alternados por los jugadores, comenzando por el jugador inicial.

En cada turno, el jugador activo debe desplazar uno de los dos tótems de cuyo símbolo el jugador aun disponga de al menos una pieza a una casilla libre desplazándolo en línea recta a lo largo de casillas libres. Tras esto, el jugador colocará un disco del símbolo coincidente con el del tótem en una casilla libre ortogonalmente adyacente.

Existen una serie de casos particulares:

  • Si todas las casillas ortogonalmente adyacentes al tótem escogido por el jugador están ocupadas, el jugador podrá realizar un movimiento de salto en línea recta hacia el siguiente espacio libre en la dirección del salto, colocando la ficha en una casilla libre ortogonalmente adyacente a la casilla en la que aterrice el tótem.
  • Si, ante el caso anterior, el jugador realiza un salto con un tótem y la casilla en la que aterriza no dispone de casillas ortogonalmente adyacentes libres, el jugador podrá colocar la ficha del símbolo coincidente con el tótem en cualquier casilla del tablero.
  • Si el jugador escoge un tótem completamente encerrado todas las casillas de la fila y la columna que se cruzan en la casilla ocupada por el tótem están ocupadas, el jugador podrá colocar el tótem en cualquier casilla del tablero.

Fin de la Partida

La partida finaliza inmediatamente cuando un jugador consigue conformar una línea recta de cuatro piezas consecutivas de su color o del mismo símbolo (para este segundo caso no importa el color de las piezas).

Alternativamente, la partida finalizará en tablas si todos los jugadores colocan todas sus piezas y nadie consigue formar la línea objetivo.


Opinión Personal

Cosmoludo se ha convertido en una de esas editoriales de las que estoy deseoso de recibir noticias. Y cada vez que anuncian un nuevo diseño se me ponen las orejas tiesas, pues se centra exclusivamente en abstractos en un formato muy atractivo, con cajas con cierre magnético, dimensiones relativamente reducidas y unos acabados ajustados a precio.

Detalle Tablero
Detalle Tablero

Por eso cuando anunciaron el juego que hoy nos ocupa rápidamente me puse en contacto con ellos porque tenía la imperiosa necesidad de probar qué tal se comportaba en mesa. Ahora toca contaros qué tal funciona este Oxono, no sin antes agradecer a la editorial la cesión de la copia que posibilita la parrafada que ya ha dado comienzo.

Oxono parece la evolución del anterior diseño del autor, justamente el anterior título en la serie de Cosmoludo, esto es, Yoxii (aquí su tochorreseña), ya que recurre a la misma mecánica principal, esto es, un tótems que se desplazan por un tablero cuadriculado y que permiten al jugador depositar una pieza de su color en una casilla adyacente al tótem.

Sin embargo, la premisa de ambos juegos es bastante distinta. Mientras que en Yoxii el objetivo era intentar prever la casilla en la que iba a quedar encerrado el tótem para haber colocado piezas del mayor valor posible en las casillas circundantes, aquí tenemos que formar una hilera de cuatro piezas consecutivas en vertical u horizontal, lo que vendría a ser un objetivo más habitual en los abstractos.

La gracia es que ahora no tendremos un único tótem, sino que tendremos dos, cada uno con un símbolo distinto. Y cada jugador va a tener dos conjuntos de piezas de su color, uno para cada símbolo de los tótems. Así, cuando se desplace un tótem, el jugador tendrá que colocar una de sus fichas con símbolo coincidente.

Detalle Tablero
Detalle Tablero

Hasta aquí todo parece relativamente sencillo. Pero la cosa cambia bastante cuando, a la hora de conformar la hilera, es posible aprovechar las fichas del contrario, ya que existen dos tipos de configuraciones validas. Por un lado, obvio está, alienar cuatro fichas del color del propio jugador, independientemente del símbolo que estas muestren.

Sin embargo, también se ganará la partida si el jugador coloca cuarta ficha en una hilera de fichas del mismo símbolo, sin importar el color de las fichas. Y esto es lo genera una dinámica muy atractiva. De entrada, obliga a los jugadores a equilibrar su reserva de fichas, ya que puede parecer muy tentador utilizar un tótem como si fuese una máquina de pintar carriles en la carretera, haciendo lo mismo varios turnos consecutivos e ir colocando piezas. Pero claro, esto sería un suicidio, porque una vez el jugador alinee tres piezas del mismo símbolo, permitirá a su rival colocar la cuarta siendo de su color y proclamándose vencedor.

Pero es que, además, abusar de un tótem puede conducir a un bloqueo en la parte final de la partida, ya que no tendremos permitido desplazar un tótem si no disponemos de al menos una ficha del símbolo coincidente. Y ya os aviso que es fundamental poder desplazar ambos tótems.

Los primeros turnos de la partida serán más bien de posicionamiento, negando al rival las opciones que vaya planteando y, paralelamente, presentar opciones de alinear fichas que el rival se vea obligado a frenar. Esto provocará que el tablero se pueble de fichas y los tótems vean menguado su margen de maniobra de forma critica, llegando un momento en el estos acaben quedando encerrados al no disponer de casillas adyacentes libres.

Detalle Tablero
Detalle Tablero

Cuando esto ocurra se abrirá la opción de realizar saltos rectilíneos al más puro estilo YINSH (aquí su tochorreseña) o como con el saltamontes en Hive (aquí su tochorreseña), esto es, un salto rectilíneo aterrizando en el primero hueco libre en la dirección del salto, colocando posteriormente la ficha en una casilla ortogonalmente adyacente que se encuentre libre.

Pero… ¿qué pasa si aterriza en una casilla que también tenga todas sus casillas ortogonalmente adyacentes ocupadas? Ese es el momento al que ambos jugadores quieren llegar, ya que conseguir esta posición, esto es, saltar a un hueco encerrado, permitirá al jugador colocar la ficha del símbolo coincidente en cualquier casilla del tablero, algo tremendamente potente porque, a estas alturas de la partida, es bastante probable que existan tres fichas alineadas a las que le falte la cuarta para finiquitar el asunto.

De esta forma se desarrolla el juego combinacional en el que los jugadores intentan calcular los movimientos que van a sucederse para no regalar al rival la opción de ser quienes salten al hueco y poder colocar la pieza donde quieran. Y es que cuando a los jugadores le quedan menos de la mitad de sus piezas, no es complicado planificar la secuencia de movimientos para intentar ajustar el número de los mismos.

Gustándome mucho Yoxii, creo que este segundo diseño de Jeremy Partinico le ha quedado mejor, de forma que Oxono rivaliza de forma importante con Hokito (aquí su tochorreseña) por ser el mejor diseño de la colección hasta el momento. Si tenéis curiosidad por probarlo, está implementado en Board Game Arena.

Detalle Tablero
Detalle Tablero

En cuanto a producción, nos encontramos con unos acabados de bastante buena calidad, con unas piezas de madera de grandes dimensiones y densidad (especialmente los tótems), aunque es cierto que el tablero muestra un cartón más fino de lo deseable. Como principal novedad respecto a anteriores producciones, aquí los símbolos están tallados y no son serigrafias. Un acierto desde mi punto de vista. El reglamento está bien estructurado y no deja lugar a dudas.

Y vamos cerrando. Oxono es un abstracto para dos que, si bien recurre a la manida premisa de conformar una hilera de elementos con una característica en común, se apoya en un sistema de despliegue de fichas que genera una dinámica de cálculo bastante interesante, con una primera parte de la partida de tanteo en la que los jugadores se limitarán a controlar al rival para, una vez el tablero esté relativamente poblado, pasar a calcular para conseguir llegar a una posición victoriosa. Un juego ágil, entretenido, con una producción ajustada (ni ostentosa, ni austero). Por todo esto le doy un…

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