Como bien saben ustedes, no soy lo que se dice un amante de los juegos puramente colaborativos. Pero de vez en cuando a uno le gusta salir de su zona de confort y probar cosas nuevas. Hace algunas semanas tuve la oportunidad de probar el Zombicide en un ambiente ideal, resultando una partida muy entretenida, con buenos momentos de tensión y discusión, intentando encontrar la mejor salida posible a la situación que se nos había planteado. Y es por eso que hoy nos encontramos aquí, reseñando un juego de este tipo. En esta ocasión, Jupiter Rescue.
Formamos parte de un equipo de humildes robots de mantenimiento que se encargan de mantener la estación espacial limpia y operativa para que los colonos hagan… lo que sea que hagan. Desgraciadamente, la estación ha sido invadida por Creeps, criaturas alienígenas que avanzan lentamente hacia su comida, nuestros queridos colonos, para así poder multiplicarse. Los únicos capaces de evitar la completa aniquilación de los colonos somos nosotros, gracias a nuestro conocimiento de la estación, unas cuantas herramientas especiales y habilidades únicas que cada uno tendrá implementado en su código para realizar su trabajo eficientemente.