Reseña: Cosmogenesis

Introducción

Cosmogenesis es un juego que te invita a crear tu propio sistema estelar. Tu solitaria estrella, recién formada, está acompañada por un cinturón de asteroides, y una larga vida por delante. Haz que los objetos colisionen y crea planetas terrestres, gigantes gaseosos y satélites que los acompañen. Utiliza cometas para entregar el material necesario para desarrollar un entorno favorable para la vida en los planetas terrestres, igual que sucedió en el Sistema Solar, con la Tierra, hace miles de millones de años. O estrella esos cometas contra los gigantes gaseosos para crear un sistema espectacular de anillos a su alrededor, como el que acompaña a Saturno. ¿Dónde se desarrollará la vida en tu sistema? ¿Será en un acogedor planeta terrestre, como la Tierra? ¿O será en una luna alrededor de un majestuoso planeta gigante que domine gran parte de su firmamento? Moldea tu sistema según los objetivos que tú mismo elijas. Cada decisión que tomes marcará tu camino hacia la victoria.

Portada

Así se nos presenta este Cosmogenesis, un diseño de Yves Tourigny (Blueprints, Expedition: Northwest Passage). El juego fue publicado en 2017 por Ludonova en una edición en inglés y español. De las ilustraciones se encarga Tim Barton, siendo esta su primera incursión en el mundillo de los juegos de mesa.

Se trata de un juego de 2 a 4 jugadores, con una edad mínima sugerida de 10 años y una duración aproximada de unos 60 minutos. El precio de compra recomendado es de 45€. Para esta reseña se ha utilizado una copia de la edición en español e inglés de Ludonova.

Contraportada

Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.



Contenido

Dentro de una caja de cartón de dos piezas (tapa y fondo), de dimensiones 29,7×29,7×7,2 cm. (caja cuadrada estándar tipo Ticket to Ride), nos encontramos con los siguientes elementos:

  • Tablero Central (de cartón)
  • 4 Tableros de Sistema (de cartón)
  • 4 Tableros de Expansión (de cartón)
  • Fichas de Cuerpos Celestes (de cartón)
  • Cuerpos terrestres:
    • 30 de Tamaño 1/2
    • 15 de Tamaño 3
    • 10 de Tamaño 4
  • Gigantes Gaseosos:
    • 10 de Tamaño 1
    • 5 de Tamaño 2
  • 10 Objetos Exóticos (a doble cara)
  • 35 Asteroides (de cartón)
  • 25 Cometas (de cartón)
  • 25 Losetas de Objetivo Planetario (de cartón)
  • 19 Losetas de Objetivo Estelar (de cartón)
  • 30 Discos Marcadores (de madera)
  • 16 Peones de Jugador (4 en cada color: celeste, morado, naranja y gris) (de madera)
  • Marcador de Jugador Inicial (de madera)
  • Bolsa (de tela)
  • Bloc de Puntuación
  • 2 Hojas de Referencia (de cartulina)
  • 4 Hojas de Ayuda de Jugador (de cartulina)
  • Reglamento
Contenido

Mecánica

En Cosmogenesis cada jugador conformará un sistema planetario alrededor de una estrella. A lo largo de seis rondas, mediante una mecánica principal de draft, los jugadores irán obteniendo elementos de un suministro central para su sistema, colocando planetas y elementos que orbiten a su alrededor. Adicionalmente, los jugadores irán obteniendo objetivos (sobre el sistema y sobre órbitas concretas), que proporcionarán la mayoría de los puntos, sin olvidar el desarrollo de la vida, especialmente en los planetas más cercanos al sol, donde la vida puede florecer y desarrollarse.


Conceptos Básicos

Empecemos hablando de los distintos cuerpos celestes que encontraremos en Cosmogenesis y mediante los cuales moldearemos nuestro sistema planetario. Todos se representan mediante unas fichas circulares con un tamaño variable.

El primer tipo de cuerpo celeste (y el más importante) son los Cuerpos Terrestres. Existen cuatro tamaños de cuerpo terrestre, marcado mediante un número de puntos en la zona inferior que indican su tamaño (de 1 a 4). Este tamaño será importante a la hora de configurar planetas y sus órbitas. Estos cuerpos pueden llegar a albergar vida, aunque esta no podrá evolucionar. Para indicar la presencia de vida bacteriológica las fichas muestran un pequeño símbolo de una bacteria para poder marcarlo. Es importante indicar que estos cuerpos terrestres podrán actuar como planetas o como lunas, teniendo en cuenta que siempre deberá respetarse que las lunas que orbiten en torno a un planeta no pueden igualarlo o superarlo en tamaño. Otro detalle interesante es que los cuerpos terrestres pueden colisionar entre sí. Como consecuencia de esta colisión, uno de los cuerpos aumentará de masa (subiendo de tamaño) y otro la verá reducida (pudiendo llegar a desaparecer si es de tamaño 1).

Cuerpos Terrestres

Los cuerpos terrestres de tamaño 3 y 4 tienen la peculiaridad de poder alcanzar condiciones óptimas para el desarrollo de la vida. Es por eso que las losetas de cuerpos terrestres de tamaño 3/4 muestran por su reverso un planeta con agua y atmósfera, junto a un pequeño track de cinco posiciones con el que se marcará el nivel evolutivo de la vida que habita en él (baterías, medusas, peces, reptiles y vida inteligente).

Cuerpos Terrestres con Atmósfera

Por otro lado, tenemos los Gigantes Gaseosos, grandes cuerpos celestes que se pueden encontrar en dos tamaños: los pequeños (con 1 pequeño triangulo) y los grandes (con 2 pequeños triángulos). Por la cara frontal encontramos al gigante gaseoso en modo normal, mientras que por el reverso aparece con un sistema de anillos. Es importante indicar que los gigantes gaseosos nunca podrán actuar como lunas y, a efectos de tamaño, siempre serán mayor que cualquier cuerpo terrestre.

Gigantes Gaseosos

Luego tenemos los Asteroides, que no dejan de ser cuerpos terrestres de tamaño 1, aunque, a diferencia de los cuerpos terrestres anteriores, estos no pueden actuar como planetas, sino que simplemente podrán orbitar como lunas. Por supuesto, podrá colisionar para aumentar el tamaño de otros cuerpos terrestres. Adicionalmente, los asteroides pueden utilizarse para varias acciones, siendo tal vez la más importante la de poder generar vida en cuerpos terrestres.

Asteroides

Por otro lado, tenemos los Cometas, que son otro cuerpo celeste de menor tamaño que tendrá la facultad de generar atmósfera y agua en cuerpos terrestres de grandes dimensiones (colisionando contra ellos), o bien generar un sistema de anillos en los gigantes gaseosos.

Cometas

El último tipo de elemento que puede pulular por nuestro sistema son los Objetos Exóticos. Estos elementos no formarán parte directa de nuestro sistema, ya que no funcionan ni como planetas ni como lunas. Sin embargo, elevarán el valor del sistema y proporcionarán acciones adicionales. Para ello se muestran uno o dos símbolos con el tipo de acción que habilitan. Cada loseta de objeto exótico muestra dos caras, con un tipo distinto por cada una.

Objetos Exóticos

Paralelamente los jugadores irán obteniendo unas losetas de objetivos con las que obtener puntos al final de la partida. Existen dos tipos. El primero son los Objetivos Planetarios, representados en una loseta con rectangular con una semicircunferencia recortada en uno de los lados. Estos objetivos marcan una cantidad de puntos de victoria y una configuración básica para un planeta y sus lunas, además de unos beneficios en la zona inferior Cuando un jugador consiga dicha configuración podrá jugar la loseta y acoplarla al planeta correspondiente para recibir los beneficios y anotar los puntos de victoria al final de la partida.

Objetivos Planetarios

El otro tipo son los Objetivos Estelares, que estos marcan un requisito a intentar completar de forma conjunta entre todos los cuerpos celestes del sistema. Estas losetas entran en juego de forma directa tan pronto las consigue el jugador. Hay distintos tipos de objetivos estelares (dentro de una órbita, según la serie de planetas, por cantidad de elementos). Adicionalmente, muestran una cantidad de puntos de victoria que se obtienen si, además, son el que mejor cumplen la loseta de objetivo entre todos los jugadores. Esto no quiere decir que el resto de jugadores puedan puntuar el objetivo de otro jugador.

Objetivos Estelares

Todos estos elementos se obtendrán de un Tablero Central que muestra 5 zonas diferenciadas. A excepción de una zona, todas muestras cuatro espacios para colocar peones y marcar que un jugador ha tomado un elemento de dicha zona (no se podrá tomar más de un elemento de una misma zona). Las zonas del tablero son:

  • En la zona superior izquierda aparece el track de ronda, con el que llevar el progreso de la partida.
  • En la zona superior derecha encontramos la zona de asteroides y cometas.
  • En las zonas inferior derecha e izquierda encontramos dos zonas para cuerpos celestes.
  • Y en la zona central encontramos 5 espacios para colocar losetas de objetivos.
Tablero de Suministro

Para marcar las zonas en las que un jugador ha tomado un elemento se utilizan unos Peones circulares. Cada jugador solo puede tomar un elemento de cada zona.

Peones

Los jugadores colocarán la mayoría de elementos en su Tablero Personal, que representa a la estrella que alumbra su sistema en torno a la cual se establecen cinco órbitas. Las tres inferiores representan las más cercanas a la estrella, donde podrá desarrollarse la vida. A continuación, vendría el cinturón de asteroides, donde los jugadores pueden almacenar asteroides y cometas para su uso posterior. Finalmente, en la zona superior encontramos dos órbitas más, con el inconveniente de que la vida no puede desarrollarse al estar demasiado alejada de la estrella. Para colocar los planetas el tablero muestra unas hendiduras semicirculares al comienzo de cada órbita. Y en la zona derecha hay una muesca para colocar los objetivos estelares.

Tablero Personal

Existe la opción de ampliar el número de órbitas del sistema gracias a los Tableros de Extensión, que añaden dos órbitas lejanas. Al igual que en las órbitas más alejadas del sol del tablero personal, en estas órbitas la vida no podrá pasar del estadio bacteriano.

Extensión de Tablero

Por último, para marcar los objetos exóticos y el nivel de vida en los cuerpos terrestres se utilizan unos Marcadores Circulares.

Marcadores

Con esto tenemos suficiente.


Preparación de la Partida

  • Se despliega el tablero de suministro en el centro de la mesa.
  • Se forma una reserva general con marcadores, asteroides y cometas.
  • Se coloca un disco marcador en el track de rondas del tablero de suministro.
    • En partidas de 2/3 jugadores se devuelven a la caja las fichas de cuerpos terrestres, gigantes gaseosos y objetos exóticos que marcan +3 (para 2 jugadores) o +4 (para 2/3 jugadores).
  • Se forma una reserva general con 10 Cuerpos Terrestres de tamaño 1, 3 y 4 (10 de cada).
  • El resto de fichas de cuerpos terrestres, gigantes gaseosos y objetos exóticos se introducen en la bolsa.
  • Se mezclan los objetivos estelares y se forma una reserva (en una pila bocabajo) con un numero dependiente de la cantidad de jugadores:
    • 2 Jugadores: 9 Objetivos
    • 3 Jugadores: 12 Objetivos
    • 4 Jugadores: 15 Objetivos.
  • Se procede igualmente con los objetivos planetarios:
    • 2 Jugadores: 11 Objetivos
    • 3 Jugadores: 15 Objetivos
    • 4 Jugadores: 19 Objetivos
  • Se rellenan los espacios del tablero de suministro con objetivos estelares, asteroides, cometas y cuerpos celestes extraídos de la bolsa. La cara del cuerpo es aleatoria, salvo en caso de cuerpos terrestres de tamaño 3/4 o gigantes gaseosos, que se colocarán por su cara frontal (cuerpos terrestres sin atmosfera y gigantes gaseosos sin sistema de anillos).
  • Se coloca en la reserva una extensión de tablero por jugador en la partida.
  • Cada jugador recibe un tablero de sistema y 4 peones del color que elija.
  • Se escoge al jugador inicial y se le entrega el monolito representativo.
  • Por último, cada jugador roba 2 objetivos planetarios, de los cuales se mantendrá uno y se devolverá el otro a la parte inferior de la pila.

¡Ya podemos comenzar!

Partida Preparada

Desarrollo de la Partida

Una partida de Cosmogenesis se desarrolla a lo largo de 6 rondas. Cada ronda consta de 2 fases.

Fase I: Selección

Comenzando por el jugador inicial y continuando en el sentido de las agujas de reloj, los jugadores alternan turnos hasta que han colocado sus cuatro peones sobre el tablero de suministro. Cada uno de esos turnos consta de 2 acciones:

  • Acción Principal (obligatoria): consiste en tomar un elemento de una de las cuatro zonas del tablero central, colocando uno de los peones del jugador en la zona correspondiente para indicar que el jugador ya obtuvo un elemento de dicha zona (no se puede repetir). Posteriormente, debe ejecutar una acción con dicho elemento. Las posibilidades, en función de los elementos escogidos, son:
    • Cuerpo Terrestre:
      • Crear un planeta: el jugador coloca el cuerpo terrestre en la siguiente muesca del tablero personal (comenzando por abajo, sin dejar huecos).
      • Crear una luna: el jugador coloca el cuerpo terrestre en la órbita de un planeta de mayor tamaño que se encuentre sobre su tablero. Los gigantes gaseosos siempre se consideran de mayor tamaño que cualquier cuerpo terrestre. No podrán colocarse lunas en órbitas sin planeta. No se podrán colocar más de 3 lunas en una órbita (si por una colisión se generase una cuarta luna, se descarta la de menor valor de las generadas).
      • Colisionar: el jugador estrella el cuerpo terrestre contra otro cuerpo terrestre (planeta o luna) o asteroide de su sistema. Al colisionar, el objeto contra el que se colisiona aumenta su tamaño en uno, y el objeto colisionado reduce su tamaño en uno. Se sustituyen y voltean los cuerpos involucrados. Hay que tener en cuenta lo siguiente:
        • No se podrá colisionar contra un cuerpo terrestre de tamaño 4.
        • Las lunas resultantes de una colisión no pueden igualar o sobrepasar el tamaño del planeta sobre el que orbitan.
        • Si el cuerpo terrestre colisionado contenía vida, esta vuelve al nivel básico (bacteria).
    • Gigante Gaseoso:
      • Crear un planeta: el jugador coloca el cuerpo terrestre en la siguiente muesca del tablero personal (comenzando por abajo, sin dejar huecos).
    • Objeto Exótico:
      • Se colocan en el tablero, sobre la zona de la estrella. A partir de este momento se podrán utilizar sus beneficios.
    • Asteroide:
      • Añadir al Cinturón de Asteroides: se coloca en el cinturón de asteroides. Si se ha escogido el espacio de 1 asteroide, el jugador recibe el monolito de jugador inicial.
    • Cometa:
      • Colisionar:
        • Contra un gigante gaseoso sin anillos, generando un sistema de anillos (se voltea el gigante gaseoso)
        • Contra un cuerpo terrestre de tamaño 3/4 que no tenga atmósfera, generando agua y atmósfera (se voltea el cuerpo terrestre).
      • Añadir al Cinturón de Asteroides: se coloca en el cinturón de asteroides.
    • Objetivo Planetario:
      • Se añade a la mano del jugador.
    • Objetivo Estelar:
      • Se coloca directamente en el tablero del jugador, en la muesca para objetivos estelares.
    • Cualquier Elemento:
      • Desechar: el jugador descarta el elemento, devolviéndolo a la caja, recibiendo un asteroide a cambio, que se coloca en el cinturón de asteroides.
  • Acción Adicional:
    • Crear una Luna: se desplaza un asteroide del cinturón de asteroides a una de las órbitas del sistema con un planeta de tamaño mayor a 1, cumpliendo la restricción de no más de 3 lunas por órbita.
    • Colisionar un Asteroide: al igual que en la acción principal, se colisiona contra un cuerpo terrestre u otro asteroide para aumentar el tamaño del cuerpo contra el que se colisiona, aumentando su tamaño en uno (el asteroide desaparece).
    • Crear Vida: se descarta un asteroide y se coloca un marcador de vida en el nivel bacteria de un cuerpo terrestre (no necesariamente tiene que poder albergar vida, aunque solo evolucionará en cuerpos terrestres con agua y atmósfera).
    • Crear un Cometa: se descartan 2 asteroides y se recibe un cometa de la reserva genera, que podrá utilizarse para hacer una acción de colisión, pudiéndose, alternativamente, dejar en el cinturón de asteroides.
    • Expandir el Sistema: se descarta 1 asteroide del cinturón y se recibe la extensión de tablero, que se coloca en la zona superior del tablero personal del jugador.
    • Revelar un Objetivo Planetario: el jugador coloca un objetivo planetario sobre el planeta que cumple las condiciones mínimas exigidas, recibiendo inmediatamente la bonificación indicada en él.
    • Colisionar un Cometa: se toma un cometa del cinturón de asteroides y se colisiona contra un cuerpo terrestre de tamaño 3/4 para generar agua y atmósfera o contra un gigante gaseoso para generar un sistema de anillos.

Adicionalmente, un jugador podrá utilizar una acción de cada objeto exótico en su sistema. Para ello coloca un marcador sobre una de las casillas para indicar que ya ha utilizado dicho objeto exótico (hay objetos que admiten más de una activación). Estos objetos se podrán utilizar antes o después de la acción adicional, pero siempre después de la acción obligatoria.

Detalle Gigante Gaseoso

Fase II: Evolución y Mantenimiento

Se procede de la siguiente forma:

  1. Se avanza el marcador de ronda un espacio en el sentido de las agujas del reloj al siguiente espacio de evolución de vida.
  2. Todos los jugadores avanzan un espacio en el sentido de las agujas del reloj los marcadores de vida sobre sus planetas con atmósfera y agua, salvo que ya han alcanzado el nivel de vida inteligente.
  3. Se avanza el marcador de ronda un espacio en el sentido de las agujas del reloj al siguiente espacio con número de ronda.
  4. Se limpia el tablero de suministro. Los objetivos se descartan (se devuelven a la caja), los cuerpos celestes se devuelven a la bolsa.
  5. Se rellena el tablero de suministro, colocando objetivos del tipo correspondiente a la ronda y respetando los espacios según el número de jugadores.

Fin de la Partida

La partida finaliza al término de la sexta ronda. Se procede a la evaluación final. Cada jugador anota los siguientes puntos:

  • Puntos por Objetivos Planetarios Cumplidos
  • Puntos por Objetivos Estelares Cumplidos
  • Puntos por el nivel evolutivo de la vida en planetas y lunas con agua y atmósfera (0/1/2/3/5 puntos por nivel de vida Bacteria/Medusa/Pez/Reptiles/Vida Inteligente).
  • 1 Punto por cada Objeto Exótico en poder del jugador.
  • 5 Puntos si se posee el cinturón de asteroides más valioso o 3 Puntos si se posee el segundo cinturón de asteroides más valioso (cada asteroide suma 1 punto y cada cometa suma 2 puntos para establecer esta clasificación relativa). En caso de empate todos los jugadores obtienen los puntos correspondientes a la posición en la que empatan.
  • 1 Punto de victoria si se posee el monolito de jugador inicial.

El jugador con más puntos de victoria será el vencedor. En caso de empate, el ganador será el jugador en posesión del monolito. Si ninguno de los empatados es su poseedor, ganará el jugador con más planetas. Si la igualdad persiste, se comparte la victoria.

 


Opinión Personal

En época de quinielas para la Feria de Essen, concretamente la de la edición de 2017, había un título que llamó la atención por varios motivos. Primero fue el tema. Un juego en el que cada jugador debía desarrollar su sistema estelar. Interesante. Luego el diseñador, Yves Tourigny. El canadiense cuenta en su curriculum con juegos tan originales como Blueprints (aquí su tochorreseña) o Top This! A Flicking Pizza Game (aquí su tochorreseña). Y, por último, por ser un producto propio de una editorial patria como es Ludonova, que desde que triunfaron con Watson & Holmes: Diarios del 221B le han cogido el gustillo a eso de no depender de licencias extranjeras. De hecho, el juego que hoy nos ocupa no era la única novedad que presentaban ese 2017 en la Feria. Pero no divaguemos.

Detalle Logo

En Cosmogenesis los jugadores toman el papel de arquitectos estelares (vamos, Dioses) jugando con el universo. No a los dados, pero a una mecánica de reparto. Cada uno comenzará con un sistema virgen, únicamente con una estrella que será el punto en torno al cual orbitarán el resto de elementos con los que vayamos componiéndolo. Estos elementos serán cuerpos celestes como gigantes gaseosos, asteroides, cometas, objetos exóticos o cuerpos terrestres. Todo ello orientado por unas losetas de objetivo, tanto plantearías como estelares que determinarán cuáles serán los movimientos óptimos a lo largo de los turnos.

Como he dicho, la mecánica central del juego será un draft mediante el cual los jugadores, a lo largo de seis rondas, deberán escoger 2 cuerpos celestes de grandes dimensiones (cuerpos terrestres, gigantes gaseosos u objetos exóticos), cuerpos celestes de menor tamaño (asteroides o cometas) y una loseta de objetivo (estelar en rondas impares y planetario en rondas pares). Veinticuatro decisiones que determinarán si nuestro sistema es el mejor o no.

Al escoger uno de estos elementos tendremos que ejecutar una acción asociada al mismo. Así, si escogemos un cuerpo terrestre tendremos varias opciones, como establecer un nuevo planeta (habilitando una nueva órbita), añadir una luna a la órbita de un planeta o colisionar el cuerpo terrestre contra otro para alterar las masas de los cuerpos involucrados en el cataclismo. Lo dicho, como si fuésemos Dioses jugando con plastilina, moldeando nuestro sistema.

Detalle Suministro

Adicionalmente, los jugadores podrán ejecutar una segunda acción en su turno, aunque esta dependerá en casi todas las opciones de disponer de asteroides o cometas en nuestro cinturón de asteroides, que divide las órbitas más cercanas a la estrella de las más alejadas (detalle importante a la hora de intentar generar vida y que evolucione).

Todo enfocado a cumplir los objetivos que vayamos adquiriendo. Los planetarios nos obligarán a intentar completar cuanto antes los requisitos de las órbitas, ya que, además de proporcionar puntos al final de la partida, otorgan beneficios inmediatos a los jugadores que pueden suponer un serio empujón en nuestras divinas aspiraciones. Por otro lado, los objetivos estelares, que será el otro punto de interacción con los jugadores (además del reparto mediante el draft en turnos alternados). Y es que cada objetivo estelar proporciona puntos según un determinado patrón. Puntos que se verán aumentados si, además, el jugador que posee el objetivo es quien mejor lo cumple. Esto no quiere decir que los demás jugadores puntúen por dicho objetivo, pero sí que podrán fastidiar ligeramente al jugador que lo posee al quedar por delante en la evaluación final. Como ya estaréis suponiendo, la clave de cada partida será gestionar adecuadamente los tiempos a la hora de escoger en qué turno se escoge cada elemento y de qué sección. Es por eso que los jugadores ya comienzan con un objetivo planetario en mano.

Detalle Draft

No hay que dejarse engañar. Cosmogenesis no es el típico draft simplón en el que el peso de las decisiones es ligero tirando a pluma. Optimizar los turnos requerirá cierta planificación, y la gestión de los tiempos será vital para escoger el conjunto de elementos que más puntos nos proporcione al final de la partida. Por eso hay que tener un ojo en nuestro sistema y otro en el de los demás, teniendo muy presentes los objetivos estelares de cada uno y sus intereses a largo plazo.

El bueno de Yves ya demostró con Blueprints que se puede hacer un diseño interesante con una mecánica tan simple y que normalmente no tiene suficiente empaque como para ser el eje central de un peso medio. Y aquí casi lo consigo. Digo casi porque las partidas a cuatro son altamente satisfactorias. Sin embargo, y aquí ya entramos en el terreno de la escalabilidad, reducir el número de participantes afecta gravemente a la experiencia de juego, convirtiéndose en un diseño insulso en partidas a dos jugadores. A tres jugadores se queda un poco a medio camino, tirando más hacia lo que transmite con cuatro jugadores. Y es que, como en otros juegos con esta mecánica central y que pertenecen a la misma añada, como Azul (aquí su tochorreseña) o Dragon Castle (aquí su tochorreseña), cuanto menor sea el número de turnos intermedios entre los de un mismo jugador, menor variación del suministro general y, por ende, mas fácil es realizar proyecciones a futuro de cómo nos lo vamos a encontrar cuando vuelva el turno. Y cuanto más fácil resulte esto, menor será el interés que despierte el juego. La ventaja de Dragon Castle y Azul sobre Cosmogenesis en este sentido es que los patrones que tiene que conformar un jugador en su tablero siguen teniendo bastante margen de maniobra. Aquí hay que ceñirse a los objetivos. Y no es lo mismo tener que escoger entre tres elementos (teniendo en cuenta solo a un rival) que entre cinco (teniendo en cuenta a tres más). No muchas decisiones que se vuelven obvias con la reducción del número de jugadores en partida.

Detalle Vida

A este importante problema le debemos sumar el de la entidad del juego. Cosmogenesis vendría a ser un Blueprint vitaminado, por lo que nos encontramos con un juego que no llega a ser un filler, pero que sí deja unas sensaciones similares. Esto no es algo malo per sé, pero tras para conseguir una implementación adecuada del tema se han añadido suficientes normas para que la explicación no sea rápida y asimilable por cualquier tipo de jugador. Son un buen puñado de acciones y opciones a tener en cuenta.

Hablando del tema, este puede ser tal vez su mayor acierto. Estamos un poco saturados de juegos con temática espacial orientados a explorar y explotar recursos. Aquí jugamos a ser dioses conformando un sistema solar, con normas que respetan las leyes físicas. Es algo así como montar tu propio programa documental para ver en el salón repanchingado en el sofá. Un reclamo potenciado por el excepcional acabado artístico del juego, que llama la atención desde la portada hasta el despliegue. Es cierto que, como con casi todos los juegos de temática espacial, el juego en mesa no luce especialmente. Pero en este caso estamos hablando de colisionar cuerpos celestes y establecer orbitas planetarias. Un rollo zen que no precisa de colores estridentes que destaquen demasiado.

La rejugabilidad es otro de los puntos en los que el diseño puede cojear ligeramente. Es cierto que hay un buen puñado de objetivos y unos cuantos se quedan fuera de la partida en la configuración más multitudinaria en cuanto a jugadores. Pero es más problema de la mecánica de draft, que puede llegar a resultar repetitiva. Si se acercase más al filler y la preparación de la partida no tuviese tantos detalles sí que se podrían encadenar partidas. Pero, desgraciadamente, es algo que es difícil que ocurra.

Detalle Órbitas

Pasemos a la edición. Un producto con trampa. Visualmente parece mostrar unos buenos acabados, pero cuando llega el momento de destroquelar comienzan los nervios. Se ha utilizado un cartón extremadamente flexible que convierte al proceso de destroquelado en un suplicio por intentar no romper ninguna ficha. Y eso que el grosor es bastante generoso. Tampoco me gusta el acabado liso con cierto brillo. Provoca que los elementos tengan poco contraste y se vea como una especie de neblina según la iluminación. Los elementos de madera son estándar y no hay mucho que decir, ni a favor ni en contra. El reglamento es claro y muestra unos cuantos ejemplos para no cometer fallos.

Y vamos cerrando ya. Cosmogenesis es un juego se selección de elementos en turnos alternados que, a pesar de implementar un tema interesante de forma muy acertada, se desinfla rápidamente con las partidas, descubriéndose como un filler vitaminado con una explicación demasiado larga como para ir sacarlo a distintos grupos con asiduidad. Su peor defecto es que escala mal, siendo recomendable únicamente a cuatro jugadores, configuración en la que si aparece cierta tensión por gestionar adecuadamente los tiempos a la hora de escoger los elementos para conformar nuestro sistema. Por todo esto le doy un…

Aprobado

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