Reseña: Wingspan – Expansión de Asia
Introducción
En esta tercera expansión de Wingspan le daremos la bienvenida a nuevas especies a nuestros hábitats explorando las coloridas, intrigantes y magníficas aves de Asia. Incluye un nuevo modo bandada para ampliar el juego base de Wingspan hasta 6 o 7 jugadores y un modo exclusivo para dos jugadores.
Así se presenta Wingspan: Expansión de Asia, la tercera ampliación del juego diseñado por Elizabeth Hargrave. Fue publicada en 2022 por Stonemaier Games en una versión en inglés. De las ilustraciones se vuelven a ocupar Beth Sobel (Snow Tails, Herbaceas, Viticulture), Ana Maria Martinez Jaramillo y Natalia Rojas (que debutaron en el mundillo con Wingspan).
Se encuentra publicado en español por Maldito Games (la expansión es dependiente del idioma). Como juego independiente permite partidas a 1 o 2 jugadores, como expansión amplía el número de jugadores de 1 a 7, manteniendo la edad mínima sugerida en 14 años y una duración aproximada de entre 40 y 70 minutos. El precio de venta al público es de 45€. Para esta reseña se ha utilizado una copia de la versión en español de Maldito Games, que la propia editorial nos ha cedido amablemente.
Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.
Contenido
Dentro de una caja de cartón de dos piezas (tapa y fondo), de dimensiones 29,7×21,5×4,2 cm. (caja rectangular mediana tipo 13 Días: La Crisis de los Misiles de Cuba), encontramos los siguientes elementos:
- 122 Cartas (57×89 mm.):
- 90 Cartas de Ave
- 18 Cartas de Automa
- 14 Cartas de Bonificación
- Tablero a Doble Cara con el Mapa del Modo Dúo y el Tablero de Objetivos de Final de Ronda del Modo Bandada (de cartón)
- Dial de Turno a Doble Cara para el Modo Bandada (de cartón)
- 6 Losetas de Objetivo de Final de Ronda para el Modo Dúo (de cartón)
- 30 Fichas de Dúo (15 Por Jugador)
- 5 Dados de Alimento (de madera)
- Tablero de Comedero (de cartón)
- Bandeja de Aves (de cartón)
- 2 Tableros de Jugador a Doble Cara (de cartón)
- 16 Cubos de Acción (8 de Cada Color)
- 30 Miniaturas de Huevos (de plástico)
- 81 Fichas de Alimento (de cartón)
- Loseta de Referencia a Doble Cara (de cartón)
- Bloc de Puntuación (de papel)
- Ficha de Jugador Inicial (de cartón)
- Reglamento
- 2 Guías de Inicio Rápido para el Modo Dúo (2 Jugadores)
- Apéndice
- Reglamento del Automa
Mecánica
Si no conocéis el juego base os recomiendo que os paséis por la tochorreseña correspondiente, ya que se hacen referencia a muchos conceptos explicados en ella. Esta expansión, además de ampliar el número de aves y de cartas de objetivo, funciona como juego independiente con un modo específico para dos jugadores que cambia la forma en la que compiten por los objetivos de final de ronda. También incluye un modo para jugar a seis o siete jugadores combinándolo con el juego base.
Conceptos Básicos
Como puede funcionar como juego independiente, vamos a explicar los conceptos asociados al Modo Dúo como principales. El eje principal de este modo es el Tablero de Mapa. Este muestra una serie de casillas repartidas entre tres grupos, cada uno asociado a uno de los hábitats del juego. Cada una de estas casillas muestra un criterio para poder ser ocupado (tipo de nido, mirada del ave, hábitat, envergadura, etc.). En la banda inferior del tablero se encuentra el espacio de hilera para las fichas de objetivo del modo dúo, donde uno de los jugadores puntuará y el otro no.
Cada jugador tendrá la opción de colocar Marcadores de su color en este tablero. Estos marcadores se colocarán en los espacios del tablero personal, de forma que, cada vez que un jugador coloque un ave en su tablero, podrá colocar un marcador en un espacio libre del tablero de mapa cuyo símbolo corresponda con el ave jugada. Algunos espacios muestran una bonificación que el jugador obtiene al colocar el marcador. Al final de la partida los jugadores anotarán puntos por el mayor grupo de marcadores propios conectados entre si.
En los espacios de esta hilera se colocarán Fichas de Objetivo que harán referencia a los marcadores que los jugadores hayan ido colocando sobre el tablero de mapa, dejando de referenciar directamente a las cartas de ave en los hábitats de los jugadores.
Finalmente, se incluye un Nuevo Mazo de Cartas de Ave que tienen como principal novedad el uso de efectos con mecánica de forzar la suerte, en el que los jugadores pueden realizar lanzamientos con dados del comedero para obtener beneficios, decidiendo cuando parar para no perder lo acumulado durante el turno.
Con esto tenemos suficiente.
Preparación de la Partida
- Se baraja el mazo de cartas de ave y se coloca al lado del tablero de suministro. Tras esto, se revelan las tres primeras y se colocan en los espacios del tablero.
- Se baraja el mazo de cartas de bonificación y se deja bocabajo en el centro de la mesa.
- Se forma una reserva general con las fichas de alimento y los huevos.
- Se coloca el tablero de mapa entre los dos jugadores.
- Se mezclan las fichas de objetivo del modo dúo y se colocan aleatoriamente 4 de ellas por cualquiera de sus caras en los espacios del tablero de mapa.
- Se coloca el tablero de comedero de pájaros en el centro de la mesa y se lanzan por su parte superior los cinco dados de alimento.
- Cada jugador escoge un color y recibe 8 cubos de acción, un tablero personal, 5 fichas de alimento (una de cada tipo), 5 cartas de ave robadas del mazo, 20 marcadores de mapa (se coloca uno sobre cada espacio de hábitat) y 2 cartas de bonificación robadas del mazo.
- Ahora, cada jugador debe decidir cuantas cartas de ave mantiene en su mano, devolviendo una ficha de alimento por cada carta que se quede. El resto se descartan.
- De las dos cartas de objetivo, el jugador escogerá una y descartará la otra.
- Finalmente, se escoge al jugador inicial y se le entrega el marcador correspondiente.
¡Ya podemos comenzar!
Desarrollo de la Partida
El único cambio respecto al juego base en el modo dúo es que, cuando un jugador juega un ave en un espacio de hábitat de su tablero personal, coge el marcador de mapa y escoge entre:
- Colocar el Marcador en un Espacio Libre de Mapa del hábitat correspondiente al del ave recién jugada (aunque pudiese haber sido colocado en otros hábitats) si el ave cumple, además, el requisito indicado en el espacio de mapa. Si el espacio muestra un beneficio, el jugador lo obtiene inmediatamente.
- Colocar el Marcador en el espacio de reset. En un turno posterior, el jugador puede descartar un marcador del espacio de reset para descartar y reponer el suministro de cartas o relanzar todos los dados del comedero.
Al final de cada ronda se evalúa el criterio correspondiente del tablero de mapa y se evalúa según los marcadores colocados en el mapa. En caso de empate ambos jugadores obtienen los puntos.
Fin de la Partida
El final de la partida, en el modo dúo, los jugadores anotarán 1 punto por cada marcador del jugador perteneciente al mayor grupo de marcadores conectados entre sí en el tablero de mapa.
Variantes
Modo Bandada. Es un modo que permite jugar a seis o siete jugadores. La única variación es que hay dos jugadores actuando de forma simultánea según indican las flechas de el dial de orden de turno. Los suministros están divididos en dos grupos, de forma que los jugadores activos no se interferirán a la hora de escoger cartas o dados del comedero. El resto del juego se mantiene exactamente igual.
Opinión Personal
Hoy toca analizar la que es la tercera expansión de Wingspan, de uno de los buques insignia de Stonemaier Games (junto a Scythe y a Viticulture). Y, aunque estamos ante una expansión que es autojugable gracias a un nuevo modo de juego exclusivo para dos jugadores, recomiendo pasarse por la tochorreseña del juego base, pues muchos conceptos comentados en ella serán referenciados aquí. Y, por supuesto, agradecer a Maldito Games la cesión de la copia que posibilita la parrafada que viene a continuación.
Solo a modo de breve recordatorio, Wingspan se ha posicionado como uno de los juegos de desarrollo de cartas más queridos por la afición porque aúna varias virtudes que, si bien podrían ser consideradas secundarias, para el tipo de público al que apunta son más que conveniente, como el nivel de producción o el llamativo arte (a pesar de parecer una colección de cromos de pájaros).
Obviamente, el juego funciona bien mecánicamente y es agradable de jugar, aunque quienes estén acostumbrados a juegos con unas sinergias más potentes entre las cartas seguramente sentirán que Wingspan se les queda corto, pues los efectos de las cartas realmente no combinan entre sí, sino que se comunican a través de las acciones principales.
Dicho de otra forma, y salvo que me falle la memoria, no hay ninguna carta que impacte sobre el efecto de otra. Pero sí que el efecto de una carta puede proporcionar un beneficio que vendrá bien para activar el efecto de otra. Por poner un ejemplo, si tenemos una carta que necesita huevos para resolver su efecto, y antes podemos activar otra que proporciona huevos, pues no tendremos que preocuparnos de conseguir los huevos por otra vía (que se podría).
Es por eso que se compara mucho a Wingspan con Everdell (aquí su tochorreseña), porque más o menos apuntan al mismo tipo de público, aunque el precioso juego de animales antropomórficos es algo más complejo mecánicamente al meter de por medio la colocación de trabajadores y sí que existen sinergias entre las cartas (no especialmente fuerte, pero existe).
Otro de los aspectos que ha potenciado el éxito de Wingspan es que, gracias a esa baja interacción, el juego escala perfectamente, siendo a dos jugadores como mejor funciona. Aunque, jugado con la variante «experta» (que es la que introduce una pizca de interacción), es cierto que el azar a la hora de robar las cartas tenía un impacto tal vez demasiado elevado. Si, por ejemplo, uno de los criterios de evaluación de final de ronda era ser el jugador con más cartas de ave en sus hábitats con una envergadura mayor de cierto tamaño y el jugador no consigue que por su mano pasen cartas que cumplan dicho criterio, sentirá que no ha tenido opción de competir por dicho criterio.
Aquí es donde entra Wingspan: Expansión de Asia con su nuevo modo exclusivo para dos jugadores, y que es obligatorio en el caso de que no se combine con Wingspan original. El modo dúo realmente viene a ser una extensión de lo explicado anteriormente sobre las sinergias, de forma que ahora los criterios de evaluación de final de ronda no ligan directamente con las aves jugadas en el tablero personal, sino con un tablero intermedio (el tablero de mapa) en el que los jugadores irán colocando marcadores en función de las aves que jueguen.
Al principio de la partida es prácticamente imposible no colocar marcadores, pues cada carta de ave coincidirá con los criterios indicados por una o varias casillas de este tablero de mapa. De esta forma, los jugadores sienten un mayor nivel de competición, ya que estarán luchando por ocupar espacios claves a los que harán referencia el posicionamiento de estos marcadores, lo que me parece un acierto total sin prácticamente impactar sobre los mecanismos del juego.
También me gusta la alternativa que permiten estos marcadores, ya que, si no podemos o no queremos colocar un determinado marcador de control en el tablero de mapa cuando corresponda, podemos depositarlo en una casilla especial que permitirá descartar dicho marcador en un turno posterior para resetear el suministro de cartas de ave o relanzar todos los dados del comedero, que muchas veces un jugador no resuelve algunas de las acciones básicas del juego porque las opciones disponibles en ese momento no le son interesantes.
Así, Wingspan: Expansión de Asia ofrece, como juego independiente, una experiencia Wingspan mejorada específicamente para dos jugadores y que yo utilizaré siempre en mis partidas, por lo que fundamentalmente jugáis bajo esta configuración, creo que es un añadido bastante recomendable.
Pero, por otro lado, tal vez como expansión para gente que juega a Wingspan a tres o más jugadores sea la menos recomendable pues, en esencia, simplemente amplía ligeramente el mazo de cartas de ave de igual forma que lo hace Wingspan: Expansión Europea (aquí su tochorreseña). Sí, los efectos de forzar la suerte en las aves son interesantes (aunque es cierto que ralentizan el ritmo de la partida cuando son activados), pero hablamos de un coste bastante elevado para el impacto que supone en partidas a tres o más jugadores.
No lo he comentado, pero incluye un modo adicional para seis o siete jugadores que viene a utilizar el mecanismo de Scythe mediante el que hay dos jugadores resolviendo su turno de forma paralela dividiendo a los jugadores en dos grupos, de forma que hay dos suministros y dos comederos, por lo que las decisiones que tomen no impactan en las del otro jugador actuando en el mismo instante. Podría ser un aliciente para gente que busque juegos que funcionen a seis o más jugadores, pero al final pasará como con Caverna (aquí su tochorreseña), esto es, que muy poca gente saca el juego a mesa con este número de participantes.
Ante la típica pregunta de qué expansión es mejor de las publicadas hasta la fecha, yo seguiría quedándome con Wingspan: Expansión de Oceanía (aquí su tochorreseña), porque impacta en el juego de forma relevante y se siente como un añadido que no es simplemente ampliar el mazo de cartas. Pero, si jugáis principalmente a dos, entonces este Wingspan: Expansión de Asia se pondría en primera posición.
En cuanto al nivel de producción, se mantienen la calidad de productos anteriores, con esas impresionantes cartas con un gramaje excelso, una textura en lino muy agradable y una respuesta elástica magnifica (el enfundado es recomendable, sobre todo por tener tanto blanco de fondo). El cartón es de buen grosor y prensado, y los dados de madera tienen un tamaño generoso. El reglamento está bien estructurado y no deja lugar a dudas gracias a incluir suficientes ejemplos aclaratorios. Y en el aspecto visual, el trío formado por Sobel, Rojas y Martínez Jaramillo sigue deleitándonos con unas espectaculares ilustraciones.
Y vamos cerrando. Wingspan: Expansión de Asia es la tercera expansión para el gran éxito de Elizabeth Hargrave que tiene como principal característica el incluir un modo específico para dos jugadores, de forma que la expansión es autojugable en esta configuración. Este modo reduce el impacto del azar y vuelve más interesante el juego en cuanto a toma de decisiones. Como contrapartida, si el juego a dos no es habitual en vuestro grupo de juego, como expansión no resulta especialmente relevante más allá de ampliar el número de cartas y sus efectos y ofrecer una variante para jugar a seis o siete, que creo que tampoco será lo habitual. Pero, como muchísima gente lo juega a dos, me parece una expansión bastante recomendable, incluso como primer Wingspan. Por todo esto le doy un…
Nunca me decidí a entrar en el Winspang pero me lo estaba pensando con esta expansión.
No teniendo el básico y para jugar mayoritariamente a dos, ¿sería suficiente con esta expansión?¿Aportaría algo el básico o alguna de las otras expansiones?
Un saludo, genial tochoreseña como siempre.
Para probar el juego está muy bien. Luego puedes comprar cualquier expansión. No necesitarías el base.
Hola, tengo una dudilla.
Yo juego siempre a dos jugadores el juego base + la expansión Oceanía. ¿Se puede añadir esta expansión para jugarla a dos jugadores junto al base y a Oceanía? ¿O la única manera de jugarla a dos es de forma independiente? Me da que me he explicado fatal…
Gracias 🙂
Si, los dos tableros que trae tienen dos caras, una para jugarlo sin Oceanía y otra para jugarlo con Oceanía. De todos modos, puedes usar los tableros que ya tienes.
Buenas,
He visto que mas arriba has comentado que vale para juntarlo con cualquier expansión, mi duda es: ¿Podría comprar esta expansión/juego + Oceanía para poder jugar hasta 5 jugadores sin necesidad del Base? Por lo que veo en componentes solo me haría falta cubitos de acción para el resto de jugadores, pero esto no sería un problema ya que hay gente que los imprime en forma de miniatura de resina, es correcto? Gracias de antemano
Es correcto. Bueno, te faltaría también el tablerito de rondas.