Reseña: Teotihuacan, Sombras del Xitle
Introducción
La devastadora fuerza de la erupción del Xitle enterró y destruyó por completo Cuicuilco y Copilco, dos ciudades significativas desde el punto de vista cívico y religioso. Los supervivientes se han dispersado por todo Mesoamérica, asentándose muchos de ellos en Teotihuacán y sus alrededores. La rápida llegada ha dado lugar a un crecimiento acelerado de Teotihuacán y ha provocado la adopción de nuevas tecnologías, mientras que Teotihuacán se convierte en una sede de poder en la región.
Así se nos presenta Sombras del Xitle, la que sería segunda expansión de Teotihuacán: Ciudad de Dioses, diseñado por Daniele Tascini (Tzolk’In: El Calendario Maya, Los Viajes de Marco Polo). La expansión fue publicada en 2020 por Board&Dice en una versión en inglés. De las ilustraciones se encargan Magdalena Klepacz (Escape Tales: The Awakening) y Paulina Wach (Inuit: The Snow Folk, Trismegistus: La Fórmula Definitiva).
En nuestro país se encuentra publicado en una versión en español por Maldito Games (aunque como el juego base y la primera expansión, es independiente del idioma a excepción del reglamento). No altera los parámetros del juego, esto es, se mantiene el rango de jugadores (de 1 a 4), la edad mínima sugerida (12 años) y la duración (entre 90 y 120 minutos). El precio de venta al público es de 15€. Para esta reseña se ha utilizado una copia de la versión en español de Maldito Games, que la propia editorial nos ha cedido amablemente.
Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.
Contenido
Dentro de una caja de cartón de dos piezas (tapa y fondo), de dimensiones 15×15×3,7 cm. (caja cuadrada pequeña ligeramente más grande que la de ¡Pingüinos!), encontramos los siguientes elementos:
- 10 Losetas de Tecnología (de cartón)
- 10 Losetas de Inicio (de cartón)
- Reglamento
Mecánica
Sombras del Xitle es una expansión que únicamente amplia el número de losetas de inicio y losetas de tecnología disponibles a la hora de configurar la partida. No aplica cambios ni a nivel conceptual ni en el desarrollo de la partida.
Conceptos Básicos
Esta expansión no incluye ningún elemento que aporte carga conceptual al diseño. Únicamente se incluye un nuevo juego de Losetas de Inicio (algunas relacionadas con la primera expansión, Preclásico Tardío).
Y por otro lado, se incorpora un nuevo juego de Losetas de Tecnología, que amplían la cantidad disponible a la hora de configurar cada partida.
Con esto tenemos suficiente.
Preparación de la Partida
Simplemente se añaden las nuevas losetas a las del juego base, teniendo cuidado de retirar aquellas que hagan referencia a la expansión de Preclásico Tardío en caso de no jugar con ella.
Desarrollo de la Partida
Esta expansión no altera en absoluto el desarrollo de la partida más allá de los efectos de las losetas de tecnología.
Fin de la Partida
Esta expansión no altera el final de la partida.
Opinión Personal
No cabe duda de que Teotihuacan: Ciudad de Dioses fue uno de los grandes éxitos de 2018. Un diseño que tomaba muchos elementos de esa obra maestra de la innovación lúdica que es Tzolk’In: El Calendario Maya (aquí su tochorreseña) para ofrecer un mecanismo principal distinto que, si bien no era tan innovador, también exigía a los jugadores manejar los tiempos a la hora de decidir cuándo activar un trabajador y cuando mantenerlo en su posición.
Hoy toca analizar una pequeña expansión que nos ha llegado casi de sorpresa, cuando nadie se la esperaba, y al poco de haberse publicado lo primera gran expansión (que, casualmente, también comparte muchos de los añadidos que en su día incorporaba a Tzolk’In su expansión Tribus y Profecías). Vamos a ver qué aporta, no sin antes agradecer a Maldito Games la cesión de la copia que posibilita esta tochorreseña. Por supuesto, como en todo análisis de expansión, os recomiendo que os paséis por la tochorreseña del juego base en caso de no conocerlo, pues haremos mención a muchos conceptos que se explican en ella.
A modo de breve repaso, recordar que Teotihuacan es un juego cuya mecánica principal es un rondel de dados en el que, a lo largo de las rondas, los jugadores disfrutan turnos consistentes en desplazar uno de sus dados (de uno a tres pasos) a lo largo de un rondel de ocho posiciones, activando una de las posibles acciones en el espacio que se detenga y, en muchos casos, teniendo en cuenta el número de dados presentes en el mismo (tanto propios como de los rivales).
Estos espacios de acción se podían dividir en dos grandes grupos: de obtención de recursos (3 de ellos) y de construcción (otros 3), quedando dos espacios un poco aislados. Por un lado, el palacio, que realmente sirve como punto de partida cuando los dados renacen (en este juego cuando alcanzaban cierto grado de madurez, representado mediante su valor, los dados morían y renacían), aunque permitía la activación de ciertos efectos. Y por otro, el espacio que permitía desarrollar tecnologías, las cuales potenciaban los efectos de ciertas acciones. De nuevo, un concepto presente en Tzolk’In, aunque en este caso más simplificado (simplemente se activaba una de las losetas disponibles asumiendo un coste, no como en el juego de los engranajes, que habría que desarrollarlas en varias etapas) y con mayor variabilidad (en Tzolk’In era una matriz estática, mientras que aquí son losetas cuya combinación varia de una partida a otra).
Sin embargo, a pesar de ser un sistema más interesante, resultaba curioso la escasez de losetas incluidas en el juego base (solo 9). Entrando 6 en cada partida, por lo que esta virtud quedaba diluida de forma importante. Resultaba ligeramente decepcionante que en cada partida apareciesen casi las mismas losetas (como mínimo se repiten 3 de la partida anterior. A esto le sumamos el hecho de que muy interesante tiene que ser el combo que se presente para acudir a dicho espacio más de dos o tres veces en la partida.
Estaba claro que era uno de los aspectos a mejorar en futuras expansiones. Y por eso sorprendió aún más que en la primera gran expansión del juego, Preclásico Tardío (aquí su tochorreseña), no se incluyese ni una loseta de tecnología, aunque fuese para aprovechar los nuevos conceptos introducidos en la misma.
No sé si ha sido una estrategia comercial o que el personal lo ha reclamado insistentemente (me decanto por lo primero), pero este problema es el que viene a solventar Sombras del Xitle incluyendo un nuevo conjunto de diez losetas de tecnología, esto es, una cantidad mayor de las que incluía el propio juego base.
Diez nuevas losetas con efectos tan interesantes como obtener puntos de victoria al desbloquear trabajadores, avanzar pasos adicionales en el track de construcción de la pirámide, liberar al jugador de la restricción de orientación de las losetas de decoración o, la más sorprendente, poder retrasar un dado un paso antes de ejecutar la acción principal. Está claro que este conjunto de losetas enriquece la experiencia de juego, abriendo nuevas opciones estratégicas (y sin tener que recurrir a conceptos mecánicos para ello).
Para que no fuese prácticamente una miniexpansión, la caja se complementa con otro set de losetas iniciales que también hacen uso de conceptos de la primera expansión. En este caso no es un añadido tan «relevante», pero bueno, al menos le otorga algo de entidad al producto y, sobre todo, tiene en cuenta a la primera expansión y su imponente nuevo templo naranja, aunque hay algunas que ofrecen beneficios bastante peculiares, como el de poder disfrutar del cuarto dado desde el primer turno de la partida.
Como veis, estamos hablando de una miniexpansión cuyo único fin es aumentar ligeramente la variabilidad en la preparación de la partida y que seguramente tendría que haberse incluido en la primera expansión. Tener que pasar por caja otra vez puede provocar que muchos decidan dejarla de lado, aunque el completismo es una característica habitual del coleccionista lúdico, por lo que otros tantos se harán con ella. O también se harán con ella los que saquen el juego base a mesa con mucha asiduidad.
Pasemos a la edición. Al igual que en el juego base, los elementos de cartón tienen un grosor adecuado y se destroquelan fácilmente. El reglamento simplemente indica como utilizar las losetas. La portada de esta expansión corre a cargo de Jakub Fajtanowski, y la verdad es que es de las más llamativas, aunque luego temáticamente no tenga especial relevancia, ya que no se incorpora nada que haga referencia a la entrada en erupción de un volcán ni nada por el estilo.
Y vamos cerrando. Teotihuacan: Sombras del Xitle es una miniexpansión que únicamente amplía el número de losetas inicio y de losetas de tecnología. No aporta ni un solo concepto mecánico nuevo y solo tiene sentido su adquisición si queremos disfrutar de una mayor variabilidad de partidas en cuanto a tecnologías disponibles (el juego base era muy pobre en este aspecto concreto). Solo recomendable para aquellos que le saquen mucho partido al diseño de Daniele Tascini. Por todo esto le doy un…
Anoche la probé y la encontré indispensable para el desempeño de “preclásico tardío“. Si me incomoda el que no la hayan incluido desde un inicio en la expansión anterior, pero la experiencia de juego mejoró de forma tan impresionante, que la recomendaría sin pensar!
Para mi gusto lo más sobresaliente de la expansión anterior es el templo naranja, y que no tuviera motores directos de ascenso me incomodaba mucho, el usar iconografías que lo permitían sin una representación gráfica, para mi toc mental me incomodaba y dejaba un gusto a regla familiar. Así que abrí mi mente luego de la última partida y decidí investigar el contenido de esta expansión, y quede maravillado con el gusto de la partida de anoche ! Le imprimió mucho brillo y la tensión por conseguir un buen motor de juego, se duplicó !
¿Y si sólo tienes el juego base merece la pena esta expasión? Que el juego base adolezca de estas losetas sí lo veo un problema. Que con la primera expasión ampliaran el juego base no lo veo tan atractivo, desde mi punto de vista.
Se pueden utilizar sin preclasico tardío. Simplemente ofrecen un ascenso para uno de los 3 Templos base en vez del naranja.
Como digo, si sacas el juego con asiduidad, si recomiendo su compra.
La expansión de Precladico tardío no me gustó nada, el templo naranja no te aporta nada al juego base, y los sacerdotes solo lo vuelven un Pelin asimétrico, eso si la nueva loseta para decoración mejora la experiencia, pero tampoco es indispensable.
Y esta segunda expansión incrementa las tecnologías, que es una ayuda pero como dice Ivan, al final no es indispensable y puedes tener la misma experiencia de juego solo con el Base.
Y como siempre Ivan amén por tus grandes reseñas.
Recién compre Tzolkin aún no lo pruebo, de inicio me parece más divertido Teotihuacán,
Ya veremos el por qué de ese sello verde para Tzolkin que le fue negado a Teotihuacán 🤣
El sello verde es por la innovación que supuso. Tzolkin es algo único, y más cuando se publicó. Teotihuacán es un diseño más pulido, pero le falta esa chispa.
A mi la asimétria, tanto en este como en Tzolkin me parece un añadido que de verdad aporta variabilidad y es lo más destacado. Además de homogeneizar los espacios de acción. El templo naranja viene a suplir la carencia de tecnologías. Si hubiesen unido las dos expansiones, si que habría sido un producto imprescindible.
Buenas!
Cuando dices:
«No sé si ha sido una estrategia comercial o que el personal lo ha reclamado insistentemente (me decanto por lo primero)»
Para reforzar tu argumento, solo hace falta ver los números de las losetas del base y como ahora han rellenado los números….ni se molestan en esconder el troceado….
Mi afán completista me ha hecho pillar el pack junto al set de promos.
Gran trabajo el que haces Iván!
Saludos!
Hola.
No estoy para nada de acuerdo con Fernando. Al juego base le falta variedad. Si eres jugón, en varias partidas empieza a ser repetitivo.
Me di cuenta de las losetas de tecnología nada mas probar el juego. Las del básico son muy pocas, si o si.
Y respecto a las comparativas con Tzolkin. Vaya tontería, independientemente de que son juegos con mecánicas distintas, sin lugar a dudas Tzolkin es mucho mejor juego, más exigente, le noto mas tensión y la mecánica fluye bastante mejor que en teotihuacan, llevo muchas partidas y es un juego que siempre me apetece jugar y cada partida es distinta, con solo el basico. Teotihuacan parece recortado, parece que hay muchas opciones o variedad, pero no es así. Algunas veces cuesta enlazar acciones para conseguir lo que quieres. Puede que solo sea una impresión mía. Para mi, esta expansión de losetas deberían de haberse incluido en el base, de hecho si hubiera una revisión del juego, deberían incluirlas.
Saludos.
Yo coincido en que esta expansión, y mas habiendo sido publicada solo un año después, debia haber sido incluida de base. Es el motivo principal por el que se lleva un aprobado, porque como expansión suelta realmente solo aporta variabilidad a una escala reducida.