Primeras Impresiones: Keltis
Pero bueno, centrémonos. ¿De qué va Keltis? Intentad hacer uso de toda vuestra capacidad imaginativa, porque así se presenta el juego: «Todos empezamos entre tinieblas, pero cada paso que damos nos acerca a la luz. Esto es lo que dice la sabiduría céltica sobre la vida y de eso va Keltis». ¿Cómo os quedáis? Una manera elegante de decirnos que estamos ante un juego totalmente abstracto.
Pero bueno, centrémonos. ¿De qué va Keltis? Intentad hacer uso de toda vuestra capacidad imaginativa, porque así se presenta el juego: «Todos empezamos entre tinieblas, pero cada paso que damos nos acerca a la luz. Esto es lo que dice la sabiduría céltica sobre la vida y de eso va Keltis«. ¿Cómo os quedáis? Una manera elegante de decirnos que estamos ante un juego totalmente abstracto.
Pero bueno, centrémonos. ¿De qué va Keltis? Intentad hacer uso de toda vuestra capacidad imaginativa, porque así se presenta el juego: «Todos empezamos entre tinieblas, pero cada paso que damos nos acerca a la luz. Esto es lo que dice la sabiduría céltica sobre la vida y de eso va Keltis«. ¿Cómo os quedáis? Una manera elegante de decirnos que estamos ante un juego totalmente abstracto.
La mecánica es muy sencilla. Tenemos un tablero con 5 caminos de colores en los que tendremos que ir haciendo avanzar unas fichas con forma de tréboles. Inicialmente todos comienzan en la primera posición, la cual resta puntos. Tendremos que hacerlos subir en los caminos, pues cada posición que avance aumentará el valor obtenido al final de la partida (a partir de la cuarta casilla comienzan los puntos en positivo). Indicar que una de las fichas tiene una altura doble, representando la importancia de esa ficha. Funciona de igual forma que las demás, pero tiene la peculiaridad de duplicar su valor al final de la partida.
Al comienzo del turno de un jugador, este tendrá siete cartas en la mano. Hay dos copias de cada carta para cada uno de los cinco colores. La mecánica es muy sencilla. Un jugador, en su turno, puede hacer dos cosas:
- Jugar carta. Las cartas se deben jugar en una fila solapada según el color (es decir, que, como mucho, solo podremos tener 5 filas, una por cada color). La carta a jugar siempre debe ser inferior o superior (lo decide el jugador al colocar la segunda carta de la fila) a la última carta colocada.
- Descartar carta. Se toma una carta de la mano y se coloca en un mazo de descartes bocarriba.
Sea cual sea la acción realizada, lo último que hará el jugador es robar una nueva carta, que podrá ser del mazo de robo o del mazo de descarte, pero siempre la carta superior de los mazos.
Adicionalmente, en el tablero hay ciertas casillas con efectos especiales: piedras (que dan puntos al final de la partida), avanzar una piedra adicional o puntuación inmediata.
La partida finaliza en el momento que, entre todas las fichas de todos los jugadores, haya 5 fichas en alguna de las tres últimas posiciones de cualquier fila o se agote el mazo de robo. Tras esto, se realiza la puntuación, sumando los valores otorgados por las fichas y por las piedras de cada jugador.
Y poco más. Como veis, una mecánica ultra sencilla, que se explica en un momento. La verdad es que yo me lo pasé bien jugándolo. No olvidéis que a mí los juegos abstractos me pirran y disfruto bastante con ellos. De todos modos, sí que lo vi bastante azaroso, porque, al menos yo, intentaba, como es obvio, ir guardándome las cartas para la columna que más podría hacer avanzar una de mis fichas, de forma que pudiese intentar asegurarme llevarla al último nivel. De vez en cuando tenía la suerte de que alguien descartaba una carta que me interesaba. Pero apenas hubo descartes. El miedo a soltar una carta que le viniese bien a alguien pesaba demasiado. Así pues, básicamente, dependía de lo que fuese tocándome al robar una nueva carta. Si la suerte no está de tu lado, probablemente ganar sea una utopía.
Si me pareció llamativo el timing de la partida. La interacción es totalmente indirecta, pero podemos forzar a nuestros rivales a jugar cartas si empezamos a forzar la máquina y acercar el final de la partida acercando fichas a las tres últimas posiciones. De esta forma no tienen más remedio que comenzar a jugar si no quieren sufrir una sangría de puntos.
Me pareció bastante entretenido, aunque tengo ya bastantes juegos similares en mi ludoteca y tampoco me pareció nada del otro mundo. Supongo que a menos jugadores la partida será mucho más táctica. De hecho, el propio Knizia confirmó que este Keltis es una evolución del Exploradores (Lost Cities) en el que pueden participar 4 jugadores. Como digo, no le diría que no a otra partida, pero no me parece que aporte lo suficiente como para entrar en mi ludoteca.
Hola!
Yo he jugado un par de veces a KELTIS, con la particularidad de que, por no leernos las reglas adecuadamente, ambas partidas las jugamos haciendo algo mal… y mira que es sencillo el juego! 😛
Pero bueno, al menos me sirvieron para hacerme una idea de cómo funciona, y pienso como tú: no me importa jugarlo cuando encarte pero no lo compraría. Y desde luego, Knizia tiene juegos infinitamente mejores y más merecedores del Spiel des Jahres.
Un saludo!
Eso mismo. Lo de jugar mal las primeras veces es una tradición. Jugar a la primera correctamente no está bien visto 😛
A mi no me convence lo más mínimo este juego. Tiene el triste honor de ser el juego que descambié. Me lo regalaron mis primos en el verano de 2009 y es que ni lo desprecinté (entiéndase que lo había jugado antes con otra copia). Lo cambié por entonces por el Metro, y tan contento con el cambio.
Reitero, y dps que digan q me gustan todos los knizias! se nota que quien lo diga no me ha oído en persona hablar de este juego o del Modern Art (por poner otro ejemplo xDD).
Saludos!
A mi es que me pareció algo simplón. Es decir, básicamente te vas a limitar a lanzarte a la carrera o esperar a tener un ultracombo. Eso y adaptarte al ritmo de los demás. Pero nada mas.