Reseña: Biosphere
Artaios, el primer padre, tuvo seis hijos con su esposa, Branwen, la primera madre. Nacieron para ser dioses y guardianes de la biosfera. Los hermanos se amaron mucho. Eran de constitución fuerte y agudos de mente. Cualquier cosa que se propusieran, la conseguían con facilidad y sin cometer errores. Cuando los jóvenes dioses llegaron a la edad adulta, Artaios y Branwen les ordenaron a cada uno que crearan algo para añadirlo a su creación, de modo que poblase y enriqueciese el mundo. Y así, los dioses crearon seis tipos muy diferentes. El tiempo pasó y las creaciones de los dioses se multiplicaron y se extendieron sin restricción a través de la biosfera. Y así sucedió que Artaios y Branwen ordenaron a sus hijos que pusieran orden en su creación. Quien fuera el primero en poner a su población en conformidad con el orden biológico obtendría para siempre el título de «Señor de la Creación».
Así se nos presenta este Biosphere, un diseño de Christoph Bauer, Max Kleinschroth, Philipp Rösch y Tilman Schneider, siendo únicamente el primero de ellos el único con algún proyecto previo, 1655: Habemus Papam. El juego fue publicado en 2017 por Dausend Doden Drolle Verlag (DDD Verlag) en una edición en alemán e inglés (aunque el reglamento en inglés hay que imprimirlo). De las ilustraciones se encargan dos artistas: Elif Siebenpfeiffer (Elemental Clash: The Master Set) para la portada y Katharina Kubisch (Uruk: Wiege der Zivilisation, 1655: Habemus Papam o Campanile) para los elementos del juego.