Primeras Impresiones: Union Pacific
Me encanta publicar entradas en esta sección. Señal de que hay vida más allá de mi ludoteca. Como mucho habréis leído en las crónicas de esta semana (y si no, os invito a que le echéis un vistacillo), el domingo fuimos a casa de unos amigos a disfrutar de una buena tarde de juegos. Y al primero título al que jugamos fue al Union Pacific.
Para los que no lo conozcan, Union Pacific es un juego del archiconocido Alan R. Moon, autor de afamado Ticket to Ride, u otros títulos como Airlines Europe o San Marco. En este juego tomaremos el papel de inversores que intentan obtener los máximos beneficios posibles invirtiendo en acciones de las diversas compañías ferroviarias que irán prosperando a lo largo y ancho del tablero que representa el mapa de Norteamérica.
Portada de Union Pacific |
En el mapa estarán ubicadas todas las compañías ferroviarias en sus inicios con pocos trayectos establecidos. Estos estarán representados por vías de cuatro tipos. Las compañías serán de distintas envergaduras, habiendo algunas con gran capacidad para expandirse y en la que habrá muchas opciones de invertir (cartas) y otras que tendrán menos capacidad de maniobra pero por contra, invertir en ellas será más complicado.
En su turno, un jugador robará una carta de vías (que será de uno de estos cuatro tipos), que añade a su mano (que siempre será de cuatro cartas de vías en este momento). Tras esto podrá hacer dos acciones, ambas descartando una carta de vías de su mano:
- Expandir una compañía: cada compañía podrá reclamar trayectos de unos determinados tipos de vías (habrá compañías que no podrán reclamar trayectos de determinados tipos de vías). Usando una carta de vía del tipo adecuado para la compañía y el trayecto libre, se coloca un tren del color correspondiente en el hueco elegido. Tras esto, el jugador puede tomar una carta de compañía del mercado (visible) o del mazo (no visible). Finalmente, puede descartar una carta de compañía de su mano y robar una de Union Pacific.
- Invertir en compañías: descartándose previamente de una carta de vías, podrá invertir en compañías. Se permiten dos modos: dos cartas de compañías distintas o cualquier número de cartas de una única compañía.
Cada vez que se robe una carta del mazo de cartas de compañía, existe la posibilidad de que aparezca una de las cartas de fase de puntuación, momento en el que se reparten los dividendos de las compañías a aquellos jugadores que tengan acciones en la mesa (que no en la mano). El ganador será el que más dinero acumule tras la última ronda de dividendos.
Diseño austero, con sabor añejo |
La verdad es que el juego me gustó bastante. Es cierto que las mecánicas es me recuerdan mucho a otros juegos conocidos, como el propio Ticket to Ride o al Alhambra (compra de edificios/expansión de compañías bajo ciertos requisitos a cumplir con las cartas de nuestras manos, rondas de puntuación que ocurren en momentos relativamente aleatorios en función de las cartas). Lo que más me llamó la atención eran los vuelcos que ocurrían gracias a que las compañías no son propiedad de ningún jugador (en contra de las Alhambras o los trayectos en Ticket to Ride). Una compañía que está muy desarrollada puede empezar a dar beneficios a otros jugadores gracias a que estos hayan invertido fuerte en dichas compañías a posteriori. También hay que hacer uso de la memoria, pues hay que llevar la cuenta de cuanto dinero lleva acumulado cada jugador para saber el estado actual de la partida y, así, enfocar nuestros esfuerzos de forma adecuada.
Por ponerle un pero, se le notan los años, sobre todo en las ilustraciones. Un diseño que se nota de otra época y que el paso del tiempo ha convertido casi en obsoleto. Sobre todo el tema de las vías, que hay que fijarse bien porque a veces no se ve bien qué tipo de vía corresponde a cada trayecto y puede llegar a ser confuso. Pero aun así, un gran juego y con el que disfruté mucho por lo dinámico que es. Probadlo si tenéis oportunidad.
A mi¡ este juego me gusta mucho. Me da un poco de coraje por que cometí la estupidez de comprarme también el Airlines Europe, que es casi lo mismo, y como tengo el mismo síndrome de diógenes que tú, y no vendo nada, ahí están los dos en la estantería. A mi particularmente este me gusta más que el otro, pero en el grupo en el que lo juego, que son mi mujer y mis cuñadas, gusta mas el de los avioncitos.
Por el sabor añejo, y por el rollo de las vías. En el Airlines, todas las compañías pueden construir cualquier trayecto, siempre que sea continuo (partiendo desde la ciudad base). Los trayectos se pagan con dinero (que se consigue bajando acciones) y se obtienen puntos de victoria en los repartos. Ademas hay unos trayectos transoceánicos (de 8 puntos, creo) y unas bonificaciones por completar rutas en las compañías más pequeñas.Creo que ya te he explicado las diferencias, ah por último, hay un contador de valor para el valor de las distintas compañías que simplifica la fase de dividendos, en eso si es mejor.
Eso he leído, que el Airlines Europe es una reimplementación. ¿Por qué te gusta mas este que el Airlines??
Siempre he estado tentado a pillarmelo, que por Amazon no está caro. Pero tenia miedo de que se pareciese demasiado al Ticket to Ride. Por vuestra culpa ahora gana enteros. Malditos! Mi cartera os odia! 😛
Gracias por pasarte!
Me alegro de que te haya gustado. Es un juego que siempre ha funcionado en mis partidas. Gusta tanto a jugones como a ocasionales. Sencillo y profundo a la vez.
Es eso, los juegos que comento a los que me recuerdan me gustan (Alhambra, Ticket to Ride), con la diferencia de que las compañías no son propias, y en cualquier momento alguien puede levantarte el máximo accionariado 😛
Yo lo probaría sin duda. Aunque mi duda es… ¿que tal conviviría en una ludoteca en la que ya esté el Ticket to Ride?
Yo tengo los tres y chocan más el union y el Airlines. El ticket to ride es de planificación de rutas. Más chocan, desde mi punto de vista, con el Alhambra, que también lo tengo. Va a empezar a ser necesario vender…
Si consideras las losetas del Alhambra como las acciones y los tipos de edificación como las compañías, es lo mismo. Si jugando a estos juegos, hablo del Union-Airlines, ves las compañías como tuyas, mal vas. Super importantes además las compañías sin trayecto en los dos juegos.
"Ezo zi"
Tengo la Big Box y solo he probado uno de los módulos…:'(, eso si, a mi suegra le gusta.
Es lo que comentaba con Enanotrilero. Aunque el tema sea muy similar y la mecánica muy parecida, la cuestión de que las compañías no sean propiedad de ningún jugador y en cualquier momento alguien pueda levantarte ser el máximo accionista es un giro de tuerca brutal.
En mi opinión es un juego un punto mas complejo. Precisamente, comentandolo con Enanotrilero, la reimplementación realizada en el Airlines Europe me parece mas llamativa. De entrada ya no son trenes, y para mi es una mejora que puedas usar el dinero que vas ganando para ampliar los trayectos de las distintas lineas, no como en este Union Pacific, que el dinero funciona como puntos de victoria. Una vez que los ganas, ahí se quedan.
De hecho, he vuelto a poner el Airlines Europe en seguimiento a raiz de haber jugado a este Union Pacific. Creo que no desentonarían para nada. La clave es esa, que no eres propietario de nada mas que las acciones, y esto no es un seguro de nada (salvo que sepas a ciencia cierta que tienes la mayoría posible de acciones de una compañia). En ticket to ride, una vez que un trayecto es tuyo, esto ya es inamovible. En Union Pacific te puedes llevar currandote un trayecto para una compañía y que en el último momento alguien te la levante.
Hombre, el Alhambra, a diferencia que el Union y el Airlines, las construcciones son tuyas y no te las puede quitar nadie. Pero, si como dices, tienes el Union y el Airlines, si, ahí hay conflicto 😛
Ya, pero en el Alhambra no hay factor desarrollo de las compañias. Luchas por unos puntos cerrados. Es mas "sencillo".
Además, obviamente, de tener la mecánica "Carcassonne" de colocación de losetas. El Alhambra nunca sobre hombre 😛
Me gusto mucho, el apartado de "tus peros", sobre todo en el que recalcas, que hay que fijarse mucho en las "vías", por que no se notan muy bien. A si que ya sabes pa la próxima vez, ojitoooooo, jajajajjaja.
Que puntillosa! 😛
Para la próxima llevo lupa xDDDDDD
Con este juego me da miedo que acabe siendo un Monopoly de Ticket to ride. Nunca lo he llegado a probar, pero sabiendo que tiene el doble de duración que el TtR poco me apetece… yo soy más de juegos rápidos y hechar varias partidas.
¡Para nada! En duración yo diría que similar al Ticket to Ride. Los billetes no son mas que puntos de victoria (no sirven para nada mas durante la partida). A mi me pareció mas interesante porque la partida puede dar vuelcos sorprendentes cuando menos te lo esperes, cosa que es difícil que ocurra en el TtR. Si tienes oportunidad de probarlo, no lo dejes pasar!
Gracias por pasarte!