Reseña: Conspiracy – Abyss Universe
Introducción
En las profundidades del océano, la corrupción y la conspiración definen la vida del reino de Abyss. En el centro de la lucha por el poder se encuentra la Asamblea del Senado Oceánico, cuyos integrantes conspiran sin tregua unos contra otros para ganar su influencia. Organiza lo mejor que puedas tu Parlamento y convoca a los Lores más influyentes antes de que tus enemigos logren ponerlos en tu contra. ¿Conseguirás gobernar y tener el control absoluto de la Asamblea?
Así se nos presenta Conspiracy – Abyss Universe, un diseño de Bruno Cathala (Five Tribes, Noah, Cyclades) y Charles Chevallier (Kanagawa, Micropolis, Sultaniya). El juego fue publicado en 2019 por Bombyx en inglés/francés cinco versiones distintas con un color alternativo en la portada. De las ilustraciones se ocupa Pascal Quidault, responsable del aspecto de juegos como Dicium, Claustrophobia 1643 o Hit Z Road.
En nuestro país se encuentra publicado en una versión en español por Doit Games (el juego es totalmente independiente del idioma a excepción del reglamento). Permite partidas de 2 a 4 jugadores, con una edad mínima sugerida de 8 años y una duración aproximada de unos 30 minutos. El precio de venta al público es de 17,95€. Para esta reseña se ha utilizado una copia de la versión en español de Doit Games (verde), que la propia editorial nos ha cedido amablemente.
Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.
Contenido
Dentro de una pequeña lata cuadrada de dimensiones de dos piezas (tapa y fondo), de dimensiones 20,4×20,4×4,7 cm. (lata similar a la de las versiones originales de Timeline), encontramos los siguientes elementos:
- 61 Cartas Cuadradas (70×70 mm.):
- 60 Cartas de Lord
- 1 Carta de contador de Perlas
- 24 Cartas de Localización (43×65 mm.)
- 20 Fichas de Escudo de Armas (de cartón)
- 1 Ficha de Maestro de Perlas (de cartón)
- 1 Marcador para el contador de Perlas (de cartón)
- Reglamento
Mecánica
Conspiracy – Abyss Universe es un filler con mecánica principal de draft y colecciones en el que cada jugador va a formar una pirámide invertida de cartas en cinco colores posibles, con un valor en puntos de victoria y un posible efecto. En cada turno, el jugador activo debe optar por robar tres cartas del mazo y escoger una carta para añadir a su pirámide (que se rellena de izquierda a derecha y de arriba a abajo), desplegando las otras dos cartas en pilas por colores en un suministro general, o bien tomar todas las cartas de un color que haya en el suministro para añadirlas a su pirámide. Los efectos de las cartas se detonan al colocarlas en la pirámide, destacando el tema de las localizaciones (cada vez que un jugador acumula suficientes llaves, añade una nueva localización a su tablero) y las perlas, que proporcionarán 5 puntos al jugador con más perlas al final de la partida. Al final, los jugadores anotarán los puntos de la carta de mayor valor de cada color, así como puntos por el mayor grupo de cartas conectadas de un mismo color.
Conceptos Básicos
El eje del juego son las Cartas de Lores. Encontramos cartas en cinco facciones, identificados mediante un color y un símbolo que aparece en la esquina superior izquierda, bajo un círculo con un valor en puntos de victoria. En la esquina inferior derecha puede aparecer una llave, un numero de perlas o un símbolo de un tipo de acción. Los jugadores irán obteniendo estas cartas para conformar una pirámide invertida de cinco cartas en la primera fila (con una carta menos por fila a medida que se desciende). Al final de la partida se bonificará al jugador por el mayor grupo de cartas conectadas entre sí de un mismo color.
Para cada tipo de carta, cada jugador anotará los puntos de aquella que mayor valor muestre. Para indicarlo dispondrá de un conjunto de Fichas de Clan que irá colocando sobre la carta de mayor valor de cada tipo.
Hemos mencionado las llaves que pueden aparecer en las cartas de lores. Estas abren Localizaciones que se representan mediante cartas que muestran una cantidad de puntos (fija o variable) y un beneficio opcional (en forma de acción o de criterio de puntuación). Cuando un jugador reúna una pareja de llaves del mismo color (las hay plateadas y doradas), podrá conseguir una nueva carta de localización.
Por último tenemos las Perlas, que es un elemento por el que los jugadores competirán. Estas perlas pueden aparecer tanto en las cartas de lores como en las de localización. Dispondremos de una carta de puntuación en la que se irá indicando la cantidad de perlas del jugador con mayor cantidad de ellas, además de poseer en su poder la ficha de bonificación de final de partida. Basta con igualar el número de perlas de ese jugador para arrebatarle el control de dicha ficha, que aplicará su valor en puntos de victoria al finalizar la partida.
Con esto tenemos suficiente
Preparación de la Partida
- Cada jugador recibe un conjunto de cinco fichas, una de cada color.
- Se mezcla el mazo de cartas de lores y se deja bocabajo a un lado.
- Se mezcla el mazo de localizaciones y se deja bocabajo a un lado. Tras esto, se revela la primera carta de este mazo.
- Se deja a un lado la carta de contador de perlas con el marcador en la casilla de valor cero junto a la ficha de bonificación.
- Finalmente, se escoge al jugador inicial de forma aleatoria.
¡Ya podemos comenzar!
Desarrollo de la Partida
Una partida de Conspiracy – Abyss Universe se desarrolla a lo largo de un número indeterminado de turnos alternados por los jugadores, comenzando por el jugador inicial y continuando en el sentido de las agujas del reloj.
En cada turno, el jugador activo deberá escoger una de estas dos opciones:
- Robar 1,2 o 3 Cartas del Mazo. De esas cartas deberá escoger una y colocarla en su zona de juego, retornando las otras dos al suministro general organizándolas en pilas según el color de las cartas y solapándolas de forma que se puedan consultar en todo momento cuantas cartas hay de cada color y qué valor poseen.
- Tomar todas las Cartas de Lores de una de las pilas del suministro. El jugador colocará todas esas cartas en su zona de juego, pudiendo decidir el orden en el que se van desplegando en su pirámide invertida. Como excepción, si el jugador tuviese menos espacios disponibles que cartas del color escogido hubiese en la pila, decidirá cuales coloca y el resto las dejará en el suministro.
Los efectos de las cartas de lores se activan tal y como son estas son colocadas en la pirámide invertida del jugador. Si un jugador consigue reunir 2 llaves de un mismo color, podrá tomar una carta de localización de las que están reveladas, o bien robar 3 nuevas, escoger una y devolver las otras dos al suministro, dejándolas visibles y disponibles para los demás. La carta se coloca sobre la carta de lord que muestra la segunda llave, «anulando» todas las llaves reveladas hasta ahora y reseteando la cuenta de llaves. Esto quiere decir que si desde la última localización había una llave de cada color, cuando se consigue una segunda de uno de los dos colores, la que queda «suelta» se pierde a efectos de conseguir localizaciones.
Tras esto, el turno pasa al jugador de la izquierda.
Fin de la Partida
El final de la partida se detona cuando un jugador coloca la última carta de su pirámide invertida. El resto de jugadores tienen un último turno. Una vez todos los jugadores han completado este último turno, se procede al recuento final. Cada jugador anota:
- El valor de la carta de mayor valor de cada color en la pirámide (la que tiene el marcador).
- El valor de las localizaciones.
- 3 Puntos por cada carta del mayor grupo de cartas conectadas de un mismo color.
- 5 Puntos si el jugador es el maestro de perlas.
El jugador con más puntos será el vencedor. En caso de empate, el ganador será el jugador con más perlas. Si la igualdad se mantiene, los jugadores comparten la victoria.
Opinión Personal
Abyss es uno de esos pesos medios procedentes del mercado francés que es un fiel reflejo del tipo de juego que exporta el país vecino, esto es, visualmente espectacular, aunque como peso medio a lo mejor se nos puede quedar corto por aquí. Ahora nos llega un nuevo producto de la ya franquicia, que viene a condensar en un filler la esencia del juego base. Vamos a ver cómo se comporta este Conspiracy – Abyss Universe no sin antes agradecer a los chicos de Doit Games la cesión de la copia que posibilita esta tochorreseña.
Nos encontramos con un juego con mecánicas principales de draft y colecciones en el que cada jugador va a formar una estructura piramidal de cartas, con una primera fila de cinco cartas y disminuyendo en una carta en cada fila sucesiva. Estas cartas representan lores de una sociedad submarina perteneciente a una de cinco facciones (representadas por un color y un blasón), y nuestra zona de juego la cámara del senado.
Nuestro objetivo será conseguir la cámara del senado más valiosa, algo que dependerá de los valores de las propias cartas (aunque solo puntuaremos por la carta de mayor valor de cada facción, independientemente de cuantas cartas de dicha facción tengamos) y de los grupos de lores que logremos conectar dentro de nuestra pirámide, teniendo en cuenta que esta deberemos conformarla en orden, esto es, completando cada fila de izquierda a derecha sin dejar huecos antes de poder comenzar una nueva, ya que al final de la partida obtendremos una importante bonificación por el mayor grupo de cartas conectadas entre sí de una misma facción.
En cada turno, el jugador activo tendrá dos opciones. Una es robar una, dos o tres cartas del mazo y escoger una de ellas (en caso de haber tomado mas de 1) para colocarla en el siguiente espacio de la pirámide, devolviendo las otras (de nuevo, en caso de haber cogido mas de 1) a un suministro central organizado por colores. La otra es tomar todas las cartas de un mismo color que haya en el suministro, colocándolas seguidas una detrás de otra, aunque pudiendo escoger qué carta se coloca a continuación de entre todas las obtenidas.
De esta forma se establece el patrón general de actuación del juego, esto es, por un lado intentar obtener la carta más valiosa posible en cada uno de los cinco colores y, por otro, apostar por un color e intentar conseguir el grupo más grande posible de cartas conectadas entre sí de dicho color. Así, si en el suministro hay al menos 1 o 2 cartas que nos interese (ya sea por valor o por color), no habrá mucho que pensar. Mientras que si no hay nada interesante, no nos quedará más remedio que robar y rezar para que aparezca algo que nos cuadre y/o que no revelemos cartas que le vengan bien a nuestros rivales.
Al diseño se le añaden dos elementos extra para darle un poco de sabor al conjunto. Por un lado, el tema de las localizaciones. Muchas de las cartas de los lores muestran símbolos de llave, de forma que cada vez que obtengamos una pareja, podremos añadir una localización a nuestro conjunto. Estas cartas proporcionan punto de forma directa con alguna acción adicional interesante o bien un nuevo criterio de puntuación que elevará muy ligeramente el nivel de exigencia a la hora de tomar decisiones.
Por otro lado, las perlas, que son un recurso que aparece en algunas cartas de lores y de localizaciones que permitirán a los jugadores competir por una bonificación de final de partida nada despreciable, de forma que cada vez que una carta de lord con perlas pase por nuestras manos, nos haga dudar.
Y no tiene mucho más. Conspiracy – Abyss Universe es uno de esos fillers que en primeras partidas entra suave gracias a mecánicas accesible y una toma de decisiones con apariencia de profundidad. Pero, desafortunadamente, en muy pocas partidas se le ven las costuras y deja de resultar interesante.
El mayor defecto ya lo he dejado caer, y es que en muchas ocasiones se actúa de forma automática. Cuando en un turno no se tienen dudas de qué hacer, malo. Y eso ocurre en muchos turnos ya de la primera partida.
Es cierto que los efectos de las cartas, la competición por las perlas y las posibilidades que permiten las cartas de localización son un detalle a tener en cuenta, pero al final acaban formando parte de la misma dinámica, provocando que el juego pase sin pena ni gloria por nuestras mesas.
También hay que hablar del azar. Siendo un filler ligero de cartas está descontado que la Dama Fortuna va a tener influencia en la partida. Pero estamos ante uno de esos juegos en los que se llega casi a un punto de forzar la suerte (sin implementar la mecánica de forma efectiva) en la que no sabes si quedarte con lo disponible en el suministro (si hay algo) o arriesgarte a robar a ver qué toca, pudiéndose dar el caso de que lo robado mas de una carta sea aún peor que lo disponible en el suministro o, peor toda vía, potenciando el suministro para los demás jugadores.
Esto último acaba dominando el juego, de forma que siempre que haya algo medianamente potable en el suministro (basta con que sean 2 o 3 cartas), los jugadores van a acabar optando por la opción conservadora. Y si no hay nada, pues tenderán a robar solo 1 carta para no dejar opciones a los demás, aunque en ocasiones no quedará mas remedio que forzar la máquina al estar buscando un color concreto.
Es por esto que creo que como mejor funciona el juego es a dos jugadores, ya que el azar influye menos al haber poca diferencia en el tablero y tener un mayor control de las necesidades de tu rival. A cuatro jugadores el azar puede tener más peso del deseable a la hora de revelar cartas de ambos mazos. Y en cuanto a la rejugabilidad, estamos ante uno de esos juegos que con un par de partidas ya tienes la sensación de haber visto todo lo que puede ofrecer.
No es un mal diseño, pero teniendo en cuenta la espectacular competencia en cuanto a fillers de cartas, se queda corto de lo que pueden ofrecer otros juegos con mecánicas similares. Por poner algún ejemplo de diseño con mecánica de draft y colecciones, ahí tenemos Villagers (aquí su tochorreseña), con un punto de desarrollo y un sistema de selección mucho más interesante que aguanta mejor el paso por mesa en repetidas ocasiones.
Pasemos a la producción. Como título francés, nos encontramos con unos acabados de alta calidad, con unas cartas de un gramaje muy elevado, tanto que cuesta mucho barajarlas debido a una respuesta elástica pobre, simulando prácticamente ser una loseta, algo lógico teniendo en cuenta que se busca conformar una estructura que más o menos aguante sobre la mesa. Los marcadores para la carta de mayor valor son un añadido visual más para los rivales que para uno mismo, porque no es que sea especialmente complicado detectar la carta de mayor valor de cada color. Las cartas de localización si son algo más normales, con una respuesta elástica algo más interesante, aunque siendo de pequeñas dimensiones tampoco es que sea sencillo barajarlas. Aun con todo, las cartas apenas se manosean y solo se barajan al comienzo de la partida, por lo que el enfundado no es especialmente necesario. El reglamento está bien estructurado y con suficientes ejemplos como para que no surjan demasiadas dudas.
En cuanto al aspecto visual, ocurre el mismo problema que con Abyss. Estamos ante juegos con un público objetivo claramente familiar, pero nos encontramos con unas ilustraciones muy realistas e impactantes, pero con aspecto extremadamente serio. Todos los personajes que aparecen tienen cara de poquísimos amigos y, en mi caso particular, generan cierto rechazo. Soy de los que prefieren un tema y un aspecto más desenfadado, sobre todo para juegos de este tipo. Y en este caso, a pesar del enorme trabajo a nivel de ilustración, creo que es contraproducente. Comentar también el detalle de que existan cinco versiones distinta de la portada, pudiendo cada uno escoger la que más le encaje. No creo que tomasen esta decisión a nivel editorial con el objetivo de que aquellos con el gen coleccionista se hiciesen con las cinco versiones. También destaca, al igual que en el juego original de la franquicia, la ausencia absoluta de texto en la portada, pasando todo el protagonismo a la estampa. A mí no me termina de gustar, y prefiero al menos un título, aunque sea reducido.
Y vamos cerrando. Conspiracy – Abyss Universe es un filler con mecánicas principales de draft y colecciones que pasará sin pena ni gloria al no ofrecer nada especialmente diferenciador más allá de ser una versión concentrada del juego original de la franquicia y mostrar un aspecto visual tan impactante como contraproducente (demasiado serio). No es mal juego, y durante algunos turnos se toman decisiones interesantes, pero en muchos otros se activa el piloto automático, dejando de resultar interesante en pocas partidas. Por todo esto le doy un…
Hola Misut
gracias por la reseña!! pero tienes el texto repetido despues de la nota.
Hola, acabo de mirarlo y yo no veo nada raro tanto en el PC como en el movil. Puedes refrescar la pantalla pulsando control + f5 (si usas windows)??
Buenos días Iván, efectivamente, yo lo estoy mirando por el móvil y sale repetida la reseña 2 veces. He refrescado y sigue igual.
Vale ya he visto el problema y ya debería estar actualizado!
Gracias a todos por los avisos!
Lo primero, magnífico tu trabajo iMisut, tanto en el blog como con Muevecubos en MasMadera, a seguir así :D.
Tal y como dicen los otros dos compañeros, se ve por partida doble el abyss, ¿no será una conspiración del propio juego?
Bromas aparte, que vaya todo bien y gracias por todo el currele que te pegas.
Seguro que desde las profundidades marinas me están torpedeando xD
Ya lo he arreglado. Gracias por el comentario!!!
Hola Iván,
Sabiendo que la reseña habla de Abyss Conspiracy… qué opinas de Abyss? Me llaman bastante ma atención los juegos de Cathala aunque no tengo claro si hay mejores alternativas a día de hoy, aunque el arte me parece sensacional.
Mil gracias!
Albert
Pues no te sabría decir porque no he tenido oportunidad de jugarlo. Sé cómo funciona pero nunca terminó de llamar mi atención.