Crónicas Jugonas: Semana 8 del 2015 (16/02 – 22/02)
Semana parca en partidas, en la que no hemos conseguido sacar muchos momentos para poder disfrutar de nuestra maravillosa afición. Aun así, alguna que otra ha caído, con un par de estreno. Para ser una semana floja no está mal.
La primera partida no la echamos hasta el martes de Carnaval, fiesta aquí en Gijón. Así que la señorita Sandra y yo aprovechamos para estrenar uno de los dos títulos que me tocaron en la última MathTrade, Pantheon. Un juego diseñado por Bernd Brunnhofer (autor de los famosos Saint Petersburg o Stone Age) en el que seremos testigo del nacimiento, desarrollo y declive de distintas culturas cuyas tierras eran bañadas por el mar Mediterráneo. Un juego de conexión de rutas y gestión de la mano al más puro estilo Ticket to Ride, pero con un puntito más de complejidad. Como suele ser habitual en un estreno, el que os escribe se dedica a explorar posibilidades e intentar encontrarle la chicha al juego, mientras que la señorita intenta asimilar los conceptos lo antes posible para intentar alcanzar la victoria, cosa que suele conseguir. Y eso que en las primeras eras la cosa pintaba mucho mejor para mí. Pero Sandra, a base de forzar el final de cada ronda cada vez que veía que dejaba algo preparado para el siguiente turno, fue abriendo hueco poco a poco. En la puntuación final yo tenía más columnas sobre el tablero, por lo que recorté bastante, pero no fue suficiente. Resultado final: Sandra vencedora con 84 puntos por 77 que conseguí yo. Un juego correcto, con el nivel de producción habitual de Hans im Glück, pero sin ser nada del otro mundo. También es cierto que por la mecánica, dos no parece su mejor número, ya que en las casillas solo pueden colocar elementos dos jugadores distintos. Vamos, que a 2 no hay bloqueos, solo encarecimientos.
Un ticket to ride con civilizaciones y dioses |
Después, tras mucho tiempo intentándolo, por fin Sandra volvió a sentarse en frente de mí para una partidita al Marvel Dice Masters. Un juego diseñado por Mike Elliott y Eric M. Lang que toma los fundamentos de Quarriors! para proponer un juego de dos jugadores (uno contra uno), con una primera fase de selección de mazo (héroes que tendremos disponibles) y una segunda con el famoso dice-building y la confrontación directa. Era la primera partida de la señorita con las reglas de torneo, lo que le pillo un poco a pie cambiado, ya que eligió superhéroes en base a sus gustos, en vez de las posibles interacciones entre los personajes y con un coste variable, para poder ir adquiriendo dados más poderoso con el paso de los turnos. Así se encontró con cartas excesivamente caras que no le permitían progresar. Todo lo contrario que yo. Poco a poco fui mejorando mi bolsa. Aun así, los primeros golpes los asesto Sandra con los pequeños ayudantes. Mientras, yo iba mejorando mi poder, y esperé el momento adecuado para acabar la partida por la vía rápida. Victoria para vuestro querido tochorreseñador. De nuevo, buen sabor de boca y muchísimo más profundo que el Quarriors! Una pena lo de que sea coleccionable por sobres. Un sacacuartos en toda regla.
La experiencia es un grado |
Ya no fue hasta el sábado cuando volvimos a disponer de un rato para jugar. Y qué mejor que visitar a José Luis y Silvia para echar una buena ronda de partidas después de cenar. Empezamos con un Dungeon Petz con la expansión, Dark Alleys. Un juego diseñado por Vlaada Chvatil en el que tomamos el papel de una familia de diablitos que decide montar una tienda de mascotas demoníacas. Colocación de trabajadores con una pequeña mecánica de subastas y minimización de riesgos controlando las necesidades de las caprichosas e inquietas mascotas. Partida muy igualada entre Silvia, José Luis y el que os escribe, ya que Sandra desarrollo la que, probablemente, haya sido su peor partida a uno de sus juegos favoritos. Demasiados problemas para controlar a sus mascotas y no encontró el momento para venderlas de forma rentable. La partida se decidió por pequeños detalles, especialmente en la venta, ya que José Luis logró rentabilizar al máximo todas sus mascotas. Eso, unido a algunas exhibiciones en las que consiguió la primera posición le dio la victoria. Resultado final: José Luis vencedor con 67 puntos, yo segundo con 54, Silvia tercera con 52 y Sandra ultima con 16. Uno de mis juegos de colocación de trabajadores favoritos, y con el gran punto de poseer un tema muy conseguido e inmersivo. Si os gustan este tipo de juegos, este título debería estar en vuestra estantería. Eso sí, la expansión, al precio que cuesta, no se la recomendaría ni a incondicionales del juego. Cierto que añade un par de conceptos interesantes, especialmente la zona industrial y la vidente, que permiten algo más de control. Pero aun así, no mejora la experiencia de juego en exceso.
Me faltó una mascota más… |
Después, para liberar un poco las neuronas, echamos un par de partidas a mi versión P&P del juego del gran Reiner Knizia Carrera de Tortugas, rediseñado como Princesas a la Carrera, con las Princesas Disney corriendo como locas para trincar por banda al príncipe de turno. Tomaremos el papel de una Princesa Disney intentando ser la primera en alcanzar el palacio. Cada jugador en su turno jugará una carta de su mano que permitirá mover a una princesa hacia adelante o hacia atrás. Si hay princesas apiladas sobre la que se mueve, estas van con ella. La gracia es que el resto de jugadores no saben qué princesa somos (información oculta). Esta vez éramos cinco, ya que Nico se unió al desenfreno. Como he dicho, echamos dos partidas, más o menos con el mismo excelente sabor de boca. La primera la ganó Sandra y la segunda me la llevé yo. Muchos pasitos para adelante y muchos pasitos para atrás. Al estar todas las princesas ocupadas, cualquier movimiento que realizásemos para intentar esconder nuestras intenciones beneficiaba a alguien. De esta manera, el apilamiento y movimiento conjunto de princesas se convierte en algo fundamental. Y la carta de poder avanzar dos espacios de la princesa que poseemos es vital. Conseguirla y mantenerla en nuestra mano es fundamental para tener opciones de victoria. Con cinco jugadores gana muchísimo más. De hecho, dudo que vuelva a jugarlo a 2.
Corre Princesita, Corre |
Tras la diversión, volvimos a encerrarnos en un muevecubos sin alma. Tocaba otro estreno. Nada más y nada menos que la obra maestra de Rüdiger Dorn, Goa. Un juego con una original mecánica de subastas en el que los jugadores primero deciden las losetas que se reparten durante el turno. Por cada loseta, cada jugador podrá ofrecer solo una vez una determinada puja. Si es la que el propuso, paga al banco. Si no, paga al jugador que la sacó a subasta. Posteriormente, tres acciones en las que se pueden conseguir diversos recursos y losetas. Sabor agridulce ya que, a pesar de haber descrito la mecánica más importante de juego al comienzo de este párrafo, jugamos como si no nos hubiésemos leído las normas. El problema de estrenar a altas horas de la madrugada. De hecho podríamos considerar la partida como invalida. Algunos errores: siempre pagamos al banco (es decir, el jugador que promocionaba una loseta y no se la llevaba no recibía nada), el jugador que ganaba la bandera no se llevaba carta de acción especial, las losetas de plantaciones y colonia las cogíamos vacía, no dimos los bonus al ir mejorando en los distintos marcadores… un desastre absoluto. Yo creo que jamás había jugado TAN MAL a un juego. Y, aun así… ¡nos gustó! Pero bueno, no quiero ofrecer la mas mínima impresión ya que realmente no hemos jugado a Goa… hemos jugado a otra cosa.
Esta catástrofe quedará grabado en los anales de la historia |
Y bueno, con este desastre monumental terminamos la semana. El domingo estuvimos bastante liados y tampoco pudimos sacar un hueco. Pocas partidas, pero intensas e interesantes. Esperemos que esta semana todo vuelva a su cauce.
Que bien ver noticias del panteón, lo tengo para estrenar. A ver si algún día cae una reseña.
Gracias, un saludo
No fallo ni un lunes aunque no comente 🙂
Y siempre que hay alguna reseña que me llame la atención.
Gracias por el blog. Saludos
Todos los juegos de mi colección tarde o temprano reciben tochorreseña 😛
Muchas gracias por pasarte Fernando!
Jejeje, mira que ya te dije en otra entrada que jugar al Carrera de Tortugas a 2 era un sacrilegio total xDD, ahora me das la razón!! 😛
Es que los que jugáis a menudo a 2 os venís arriba con eso, os creéis que cualquier juego puede ir bien a ese número, y muchos como que… mejor no sacarlos aunque te diga el manual q se pueda a dicho número xDD, no forcéis la maquinaria 😛
El Pantheon lo probaría gustoso, y al Goa volvería a jugar, que sólo le he jugao una partida allá por 2012 (y en tu tierra además).
Saludos!
Hombre, hay que probarlo también para ver que tal va. También va mucho en cuestión de gustos 😛
El Pantheon yo creo que te gustaría. Y el Goa, a pesar del desastre morrocotudo, me gustó. Pero tras comprobar los fallos estoy deseando rejugarlo 😛