Reseña: Bruges

Introducción

Brujas en el siglo 15. La cultura y el comercio florecen y convierten a la ciudad hanseática de Bélgica en una de las más ricas de Europa. Los jugadores asumen el papel de comerciantes que deben mantener sus relaciones con aquellos en el poder mientras compiten entre sí por aumentar su influencia, poder y estatus. Pero no todo tan sencillo, ya que dramáticos acontecimientos amenazan la ciudad. Los jugadores deberán preocuparse por estas amenazas más incluso que de sus propios rivales…

Portada
Portada

Así se nos presenta este Bruges, uno de los cuatro títulos que Stefan Feld vio lanzados al mercado durante el 2013. Supongo que pocos seréis los que no conocéis al famoso diseñador alemán, pero por si acaso, recordaros otros títulos de su catálogo: Macao, Bora Bora, En el Año del Dragón o, más recientemente, La Isla o Aquasphere. El juego fue editado en su primera edición por Hans im Glück, siendo uno de los nominados al Kennerspiel des Jahres de ese mismo año (que finalmente se llevó Las Leyendas de Andor). A los pinceles tenemos al también archiconocido Michael Menzel, que, precisamente, es el creador y diseñador de Las Leyendas de Andor, además de dar vida a otros juegos como Stone Age, Chicago Express o Los Pilares de la Tierra.

El juego no ha sido publicado en nuestro país y es altamente dependiente del idioma, ya que el eje principal del juego son unas cartas con una cantidad de texto importante. Afortunadamente la comunidad de usuarios vuelve al rescate, pudiéndose conseguir una tradumaquetación bastante trabajada. El juego permite partidas de 2 a 4 jugadores, con una edad mínima recomendada de 10 años y una duración media aproximada de una hora. Su precio de compra recomendado es de 40 €. Para esta reseña se ha utilizado la edición en alemán de Hans im Glück.

Contraportada
Contraportada

Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.



Contenido

Dentro de una caja de cartón de dos piezas (tapa y fondo), de dimensiones 31,5×22,5×7 cm. (caja de Eurogame rectangular estándar, como Russian Railroads o Agricola), nos encontramos con los siguientes elementos:

  • Tablero de Juego (de cartón)
  • 4 Marcadores de 50/100 puntos (de cartón)
  • 6 Losetas de Estatua (de cartón)
  • 174 Cartas (56×87 mm.):
    • 165 Cartas de Personajes
    • 9 Cartas de Referencia
  • 50 Trabajadores (10 en cada uno de los cinco colores: amarillo, marrón, azul, morado y rojo) (de madera)
  • 20 Monedas de 1 Florín (de cartón)
  • 24 Monedas de 3 Florines (de cartón)
  • 40 Losetas Pequeñas de Canal (de cartón)
  • 45 Marcadores de Amenaza (9 en cada uno de los cinco colores: amarillo, marrón, azul, morado y rojo) (de cartón)
  • 4 Emblemas Grandes (en cada uno de los cuatro colores de jugador: azul, amarillo, rojo y verde) (de cartón)
  • 4 Emblemas Pequeños (en cada uno de los cuatro colores de jugador: azul, amarillo, rojo y verde) (de cartón)
  • 8 Peones de Jugador (2 en cada uno de los cuatro colores de jugador: azul, amarillo, rojo y verde) (de madera)
  • 12 Losetas de Mayoría  (3 en cada uno de los cuatro colores de jugador: azul, amarillo, rojo y verde) (de cartón)
  • Marcador de Jugador Inicial (de cartón)
  • 5 Dados (cada uno en uno de los cinco colores: amarillo, marrón, azul, morado y rojo) (de madera)
  • 2 Dispensadores de Cartas (de cartulina)
  • Reglamento
Contenido
Contenido

Mecánica

En Bruges representamos el papel de comerciantes intentando ganar prestigio mediante diversos medios (minijuegos). El eje principal son unas cartas de cinco tipos con las que podremos hacer seis acciones distintas, algunas de ellas dependientes del valor de unos dados que se lanzan al comienzo de cada ronda. Adicionalmente, una serie de eventos negativos irán amenazando el desarrollo de nuestra partida, teniendo que intentar evitar que trastoquen nuestros planes.


Conceptos Básicos

Empecemos con los colores de los elementos. En este juego son el nexo de unión entre ellos: los dados, los personajes, los canales, las casas y las desgracias. Vamos a ir desgranando poco a poco cada uno de ellos, pero es importante recordar que los colores los conectan. Estos son: amarillo, marrón, azul, rojo y morado.

Dados

Las cartas son el eje principal del juego. En este caso, las dos caras de la carta tienen utilidad:

  • Por el reverso nos encontramos con la ilustración de una casa de ladrillo típica de Brujas y el color correspondiente de la carta
  • Por el anverso tendremos siempre un personaje ilustrado y una banda del color correspondiente de la carta.
    • En la esquina superior izquierda tendremos el coste en florines que hay que cubrir para poder jugar dicho personaje y, justo debajo, la cantidad de puntos de victoria que otorga al final de la partida
    • En la banda lateral derecha tenemos un pequeño recordatorio de las seis acciones que se pueden llevar a cabo al jugar una carta (lo veremos más adelante)
    • El resto de la carta pertenece al personaje representado:
      • En la zona central tenemos una ilustración del mismo
      • Justo en la esquina inferior izquierda de la ilustración tenemos el tipo de personaje, representado con un símbolo:
        • Trabajador: cartas que se pueden activar una vez por ronda
        • Rayo: cartas que se ejecutan en el instante de jugarlas y solo una vez en toda la partida
        • Infinito: cartas que proveen de un determinado efecto que perdura durante toda la partida.
        • Corona de Laurel: cartas que proporcionan puntos de victoria al final de la partida
      • Finalmente, en la zona inferior izquierda de la carta tenemos el gremio al que pertenece el personaje. Este gremio es utilizado en las habilidades de las cartas. Existen 11 gremios: Nobleza (corona), Autoridad (edicto), Comedia (laúd), Mercado (bolsa), Artesanía (martillo), Corte (torre), Iglesia (cruz), Arte (pincel), Ejercito (escudo), Crimen (puñal) y Conocimiento (libro).
Cartas
Cartas

Hablemos ahora del tablero:

  • En el marco tenemos el típico track de puntuación numerado del 0 al 49.
  • En el centro tenemos una representación de Brujas rodeada por un canal y una serie de puentes y puertas.
  • En el centro de la ciudad, ligeramente a la izquierda, tenemos el Ayuntamiento, con una especie de escalera en las que nuestros peones irán ascendiendo.
  • En el centro un pequeño espacio para colocar las losetas de estatua.
  • Y por último, en el centro ligeramente a la derecha, tenemos cinco espacios para colocar los dados.
Tablero
Tablero

Los Canales son uno de los elementos en los que los jugadores pueden prosperar. Cada jugador colocará su sello en una de las puertas disponibles, dándole acceso a dos canales. Los canales puntúan en cuanto se alcance la tercera sección o se completen. Los canales son exclusivos de los jugadores (nadie puede construir en el canal de otro jugador).

Fichas de Canales
Fichas de Canales

El Ayuntamiento es otro de los elementos en los que se puede prosperar. Como veremos en la mecánica, al comienzo de cada ronda se establecerá el coste de ascender en el Ayuntamiento, avanzando nuestro peón un escalón.

Las Casas serán cartas jugadas por el reverso. La construcción de una casa requerirá el uso de un trabajador del color correspondiente. Estas casas, además de otorgar puntos, permiten cobijar a personajes (no se pueden jugar personajes si no tenemos casas libres).

Los Personajes se contratan, pagando una determinada cantidad de florines para poder bajar la carta a la mesa, colocándola sobre una Casa vacía. A partir de ese momento la carta ofrece su habilidad al jugador.

Los Trabajadores son uno de los dos recursos que manejaremos en el juego. Pertenecen a los cinco colores de los dados y serán utilizados, principalmente, para construir Casas o activar acciones de Personajes.

Trabajadores
Trabajadores

El dinero es el otro recurso a gestionar. Con el podremos costear los tramos de canales, avanzar en el Ayuntamiento y contratar personajes.

Monedas
Monedas

Otro de los elementos que otorgarán puntos a los jugadores son las Mayorías. Al final de cada ronda se comprobará quien posee la mayoría en cada uno de los siguientes aspectos: Mayor número de tramos de canal construidos, Mayor número de Personajes contratados y Posición más elevada en el Ayuntamiento. Una vez que una mayoría se consigue se volteará indicando que al final de alguna ronda la teníamos.

Elementos de Jugador
Elementos de Jugador

Por ultimo tenemos las Amenazas, que serán unos eventos que podrán ocurrirles a los jugadores a medida que avance la partida. Estos eventos requieren de tres porciones de un mismo color (cada tipo de Amenaza) para desencadenarse. Que los jugadores vayan recibiendo marcadores de amenaza también dependerá de los valores de los dados en la tirada al comienzo de la ronda.

Amenazas
Amenazas

Con esto tenemos suficiente.


Preparación de la Partida

  1. Se despliega el tablero sobre la mesa
  2. Cada jugador recibe 2 meeples, 3 losetas de mayoría, 2 sellos y 5 florines
  3. Cada jugador coloca el sello pequeño en una de las puertas del tablero y el otro en frente suya para identificarle.
  4. También se colocan los 2 meeples sobre el tablero, una en la posición 5 del marcador de puntuación y otro sobre el ayuntamiento
  5. Se forman los mazos de robo. Para ello se divide el mazo completo en 5 mazos de 33 cartas. A continuación se toman tantos mazos como jugadores haya en la partida, barajando esas cartas y dividiéndolos en dos mazos aproximadamente iguales que colocaremos sobre los decks. Los mazos restantes servirán para formar el mazo extra que, de momento, se deja a parte.
  6. Se disponen cerca del tablero los marcadores de amenaza, los florines, los segmentos de canal y los trabajadores.
  7. Se elige el jugador inicial (según el reglamento, aquel que haya frito algo más recientemente).

Y ya estamos listos.

Partida preparada
Partida preparada

Desarrollo de la Partida

La partida se desarrolla durante un número indeterminado de rondas hasta que se agote uno de los dos mazos de robo, siendo esa la última ronda.

Cada ronda consta de cuatro fases:

  1. Robo de Cartas: por orden de turno, cada jugador roba cartas de cualquiera de los dos mazos de robo hasta completar una mano de 5 cartas.
  2. Dados: el jugador inicial lanza los cinco dados y los coloca en el espacio habilitado para ellos en el tablero. A continuación se procede de la siguiente manera:
    • Por cada dado que muestre un 5 o un 6, cada jugador deberá tomar un marcador de desgracia del color del dado que lo genera. En caso de completar un circulo (tres marcadores de desgracia de un mismo color), a ese jugador le ocurrirá la desgracia
    • Los jugadores podrán ascender un peldaño en el Ayuntamiento pagando el coste del ascenso, que se calcula sumando los valores de aquellos dados que muestren un 1 o un 2.
  3. Cartas: empezando por el jugador inicial, cada jugador escoge una carta de su mano y la juega de una de las seis formas posibles (que veremos a continuación). La fase finaliza en el momento que todos los jugadores hayan jugado 4 cartas.
  4. Comprobación de Mayorías: se comprueba si algún jugador posee la mayoría en alguno de los tres aspectos (canales, ayuntamiento, personajes jugados), volteando (si no lo había hecho ya antes) la loseta de mayoría de su color correspondiente.

Con esto finaliza la ronda, pasándose el marcador de jugador inicial al jugador de la izquierda.

Detalle de los mazos
Detalle de los mazos

Las acciones que se pueden realizar al jugar una carta son:

  • Construir una Casa. El coste es de un trabajador del color de la carta. Se coloca en la mesa por el reverso.
  • Descartar un Marcador de Amenaza. Se descarta la carta y un marcador de amenaza del color coincidente con la misma. Adicionalmente, se obtiene un punto de victoria.
  • Construir un Tramo de Canal. Se descarta la carta cuyo color coincide con el siguiente tramo por construir de alguno de los dos canales, además de pagar el coste de construcción (indicado en el tramo de canal). Tras esto, se coloca una loseta de canal sobre el tramo construido. Si se completa un canal, se toma inmediatamente una loseta de estatua del centro del tablero.
  • Tomar Trabajadores de la Reserva. Se descarta la carta y se toman dos trabajadores del color de la misma.
  • Tomar Florines de la Reserva. Se descarta la carta y se toman tantos florines como valor indique el dado del color coincidente con la carta descartada.
  • Jugar Personaje sobre una Casa Vacía. Se coloca la carta sobre una casa vacía (dejando visible el color de la casa) y se paga a la reserva el coste del personaje.
Estatuas y Multiplicadores
Estatuas y Multiplicadores

Las amenazas que se desencadenan al acumular tres marcadores de un mismo color son:

  • Inundación (Azul): el jugador afectado debe devolver todos sus trabajadores a la reserva.
  • Peste (Marrón): el jugador afectado debe descartar un personaje de su área de juego.
  • Sublevación (Amarillo): el jugador afectado debe devolver todos sus florines a la reserva.
  • Incendio (Rojo): el jugador afectado debe descartar una casa de su zona de juego o un tramo de canal. Aclaraciones:
    • Si la casa contuviese algún personaje, este vuelve a la mano del jugador.
    • Si un jugador quita el quinto tramo de un canal no debe devolver la loseta de estatua obtenida, pero si vuelve a completarlo no obtendrá una nueva.
    • No se pueden dejar huecos en los canales. Siempre hay que retirar la última sección construida.
  • Conspiración (Morado): el jugador afectado pierde 3 puntos de victoria (pero no se pueden tener puntos negativos)

Fin de la Partida

La partida finaliza en la ronda en la que alguno de los mazos de robo se haya agotado. Al término de la misma, se procede al recuento final. Los jugadores anotan los siguientes puntos:

  • Los puntos indicados en las cartas de los Personajes jugados.
  • Un punto por cada Casa jugada.
  • Los puntos que otorguen los personajes con beneficios al final de la partida.
  • Los puntos otorgados por las fichas de mayoría volteadas.
  • Puntos por los canales: cada canal del que se haya construido, al menos, el tercer segmento otorga 3 puntos. Además, se suman los puntos obtenidos mediante las losetas de estatua.
  • Progreso en el Ayuntamiento: cada jugador suma los puntos indicados en el nivel en el que se encuentre su peón.

Tras este recuento, el jugador con más puntos de victoria será el ganador de la partida. En caso de empate, el jugador con más florines será el vencedor. Si el empate persiste, los jugadores comparten la victoria.

Soporte para los mazos y Ficha de Jugador Inicial
Soporte para los mazos y Ficha de Jugador Inicial

Opinión Personal

Hoy reseñamos el juego de los publicados el año pasado por el gran Stefan Feld que más ha dado que hablar. Gran editorial, gran ilustrador, gran diseñador y nominado al Kennerspiel des Jahres. A priori, un valor seguro. ¿O no? Veámoslo.

Lo primero que hay que decir es que el juego es hijo de su padre. La mano de Feld es reconocible claramente en el diseño: minijuegos interconectados mediante una mecánica principal, combos entre estos minijuegos, tema pegado que no transmite en ningún momento absolutamente nada y elementos azarosos encargados de introducir agobio y estrés de forma un tanto artificial. 100% Feld.

El juego tiene como eje principal un mazo de 165 cartas, con las cuales podremos ejecutar nuestras acciones. Como hemos dicho, tenemos una serie de minijuegos que estas conectan: construir los canales (por tramos), ascender en el ayuntamiento y jugar personajes. Por si quedaba alguna duda de que estos son las tres grandes fuentes de puntos, se incorporan unas losetas de mayoría para forzarnos a potenciar al menos un par de ellas en las distintas rondas. Y son importantes porque las partidas suelen rondar los 50 puntos, y las 3 mayorías suponen 12 (prácticamente un 25% del total).

Detalle de la zona de jugador
Detalle de la zona de jugador

Los personajes de las cartas son, a su vez, los que le dan la gracia al juego, pudiendo realizar combos muy diversos, aunque esto solo será posible con los personajes con icono de trabajador, ya que las demás cartas están enfocadas a otros fines: los de acción inmediata (rayo) sirven para fastidiar a los rivales, los de efecto infinito facilitan la vida potenciando acciones, y los de puntos de victoria (corona de laurel), como es obvio, otorgan puntos al final de la partida.

Serán pues, los personajes activables mediante trabajadores los que, a su vez, también ligarán con los canales, casas, personajes, ayuntamiento y desgracias. Como siempre con nuestro querido Feld, todo muy bien hilvanado y funcionando como un reloj.

Los minijuegos, a su vez, no están descompensados, siendo más dependiente de la elección que hagamos al comienzo del turno robando cartas. Al comienzo nos importarán poco los colores, pero a medida que progresemos, querremos obtener unos colores concretos, especialmente para los canales y para obtener trabajadores de un color determinado.

Y es en este punto en el que se fastidia la historia. Feld suele incluir en sus diseños un elemento azaroso que cumple dos objetivos: igualar el nivel de los jugadores (evitando estrategias predefinidas) y añadir un poco de agobio al asunto. Pero en este juego se le ha ido la mano. En este juego hay una combinación de dados-cartas mortal, que convierten al juego en una lotería.

Así, por ejemplo, el azar afecta a la hora de escoger las cartas por sus colores, puesto que solo podemos elegir entre las dos cartas superiores de cada uno de los dos mazos de robo. Si ninguna de las dos nos es interesante, tendremos que fastidiarnos y apostar por uno de los dos mazos con la esperanza de que la siguiente carta en la pila sea la que necesitamos. Y no solo con los colores. También influye la suerte, aunque en menor medida, en cuanto a los personajes, ya que es posible que los que vayamos robando no liguen en absoluto mientras que otros jugadores reciban el combo de la muerte. Y finalmente, el azar a la hora de lanzar los dados, que afecta a la hora de repartir los marcadores de amenaza, el valor de las cartas en florines y el coste de ascender en el ayuntamiento. Azar por todos sitios.

Detalle de los Canales
Detalle de los Canales

Hay que olvidarse de cualquier estrategia más allá de la siguiente ronda, ya que no va a ser posible preparar prácticamente nada. Hay que adaptarse a lo que te salga e intentar capear el temporal. Y esto es muy frustrante. Obviamente, hay puntos de actuación, como por ejemplo, si estamos interesados en ascender en el ayuntamiento es necesario acabar la ronda con monedas, o si no queremos sufrir efectos de las amenazas, hay que intentar tomar cartas o personajes que nos permitan deshacernos de ellos. Pero nada es controlable al 100%. En cada movimiento que realicemos, la dama fortuna tendrá algo que decir.

Siempre se habla de las bondades del azar a la hora de igualar niveles entre jugadores expertos y novatos. Pero en este caso, todas las partidas que he jugado, el que ha ganado ha sido más por suerte que por saber adaptarse adecuadamente a las cartas que le han tocado. Decir que es una oca vitaminada sería algo exagerado, porque la mecánica está trabajada, pero al final de la partida la sensación es la misma: que el ganador es el que más suerte ha tenido. Personalmente, creo que el problema está en la mecánica de robo de las cartas. El azar introducido por los dados es aceptable, pero el que en una ronda necesites una carta de un determinado color y no te salga, te destroza la ronda.

El tema, como hemos comentado anteriormente, esta totalmente pegado. Sobre todo por lo aparentemente inconexo de los minijuegos. En principio estamos desarrollándonos como comerciantes en Brujas, pero bueno, poner casas con personajes, los canales, ir subiendo en el Ayuntamiento (que nuestros meeples parecen que están jugando a la Rayuela) y las desgracias no nos transmiten en absoluto el ir medrando en la ciudad. Feld no se caracteriza por una inmersión temática conseguida, pero en otros juegos al menos, si uno se esfuerza, le pueden cuadrar las cosas. Aquí no lo consigo.

Cambiando de tercio, el juego escala perfectamente, ya que es bastante solitario. Solo hay dos elementos de interacción entre los jugadores: las mayorías y los personajes de acción inmediata. En el primer caso es una interacción menor, ya que, simplemente, con alcanzar la mayoría en algún momento, nos la aseguramos para el final de la partida. Querer seguir progresando en un aspecto para el cual ya hemos dado la vuelta a la loseta estará motivado por algún otro objetivo, y rara vez será para evitar que nuestros rivales consigan voltear esa misma loseta. Las cartas de personaje de acción inmediata, sin embargo, si son una puñalada directa al corazón de nuestros rivales, dándole donde más les duele, en sus recursos y puntos. Pero, como he dicho, el resto de la mecánica es bastante individualista, de forma que apenas hay diferencias en cuanto a sensaciones entre jugar a 2, 3 o 4. Simplemente una mayor lucha por las mayorías y un mayor efecto a la hora de jugar personajes de acción inmediata.

La rejugabilidad es, sin duda, el punto fuerte de este juego. Tal y como está diseñado, cada partida va a ser un mundo. Entre el factor suerte y la desorbitada cantidad de cartas, rara vez una partida se va a parecer a otra. Si disfrutamos con los juegos tácticos, Bruges puede ser una gran adquisición.

Hablemos de la edición de Hans im Glück. Como es de esperar, calidad suprema en todos sus componentes: tableros y losetas de cartón de buen grosor, elementos de madera con cortes originales (no reutilizados de otros juegos) y cartas de un gramaje aceptable. El reglamento viene especialmente bien estructurado, cosa de agradecer, porque de vez en cuando te encuentras cada libro de instrucciones que casi necesita un mapa para poder navegar por él. La caja viene con el típico inserto de esta editorial, con cuatro compartimentos iguales en el que almacenaremos los distintos componentes. Tamaño ideal. Los componentes quedan almacenados adecuadamente sin quedar un volumen de aire importante. Esto es gracias a los dos decks incluidos para colocar las cartas (que en la primera edición del juego no estaban incluidos). Sin estos, probablemente sí que parecería más vacía la caja.

Detalle de la zona central
Detalle de la zona central

A los pinceles tenemos al grandioso Michael Menzel, uno de los ilustradores de juegos de mesa más afamados, con un estilo propio y una cantidad inmensa de detalles. Especialmente destacable en este juego la cantidad de personajes distintos que ha tenido que ilustrar. Un verdadero trabajo de chinos. Y el tablero es una auténtica maravilla. Por ponerle un pero, la elección de los colores para los dados/cartas/desgracias/canales. No sé si era exigencia de la editorial o de Feld, pero el uso del marrón y del amarillo provoca demasiadas confusiones, especialmente si no hay una iluminación clara en la estancia. Será por colores. Es cierto que estos parecen estar escogidos en función del efecto de las desgracias, pero solo encajan al 100% las inundaciones (azul) y los incendios (rojo). Las demás (sublevaciones, peste y conspiraciones) podrían haber tomado cualquier otro color menos problemático. ¡La peste pedía el negro a gritos! Pero bueno. A pesar de todo, otro grandioso trabajo de Menzel.

Y vamos cerrando. Bruges es un juego típico de Stefan Feld, con combos, con elementos agobiantes, todo muy bien hilvanado. Pero en esta ocasión se le ha ido la mano con la influencia del azar. Se convierte en un juego meramente táctico en el que hay que intentar sobrevivir como sea posible, pero sin visos de poder desarrollar una estrategia durante la partida, lo que es frustrante a más no poder. El ganador no sabrá por qué ha ganado y los perdedores difícilmente encontrarán fallos en su manera de proceder. Es una pena, porque la edición de Hans im Glück es de gran calidad. Mención aparte merece el trabajo de Michael Menzel con los 165 personajes distintos (se habrá quedado sin modelos) y el precioso tablero. Si sois amantes de los juegos tácticos y la influencia del azar no os molesta en demasía, seguramente podríais disfrutar de este título. Pero yo espero mucho más del señorito Feld. Si encima le añadimos que hay que tradumaquetar mas de 150 cartas… Por todo esto le doy un…

Suspenso

14 comentarios

  1. SUSPENSO NAVIDEÑO!!!
    Porque tiene dados, lo sé, es por eso 😀

    Voy a leerme la reseña, cómo mola saber que no me vas a generar Hype *0*
    Mis ahorros están a salvo!

  2. Buenos días, iMisut, por decir algo.
    Compungido me hallo ante tu irreverente desplante al dios Feld. Qué despropósito! Cuánta desvergüenza! Qué indignidad!
    He leído tu reseña tratando de dejar mi fervor al margen y puedo llegar a entender el porqué de tu desazón. Lamentablemente es un juego que aún no he probado (lo sé, lo sé, atizadme, lo merezco… yo aquí dándome golpes en el pecho de puritanismo feldiano y apenas he leído la mitad de su biblia), por lo que no puedo confirmar tus sensaciones, aunque me queda claro que se trata, en reglas generales, de un descontrol de la estrategia a causa de un azar muy acusado. El juego es quizás excesivamente táctico, hay que adaptarse a cada momento a las opciones que te ofrece la mesa. Nada de plantearse desde el principio una vía estratégica para sumar muchos puntos. Entendido. Pero, si esa parte de la ecuación es tenida en cuenta,¿no se disfruta en su mecánica, sus combillos, su relojería? ¿Tan descontrolado es que el ganador no sabe por qué ha ganado y el perdedor por qué ha perdido? Hombre, si es como dices, ciertamente es algo que chafaría la experiencia del juego enormemente. Te lo diré cuando lo pruebe porque sigo convencidísimo de que tengo que hacerme con él. El juego es una preciosidad y la mecánica de los combillos con las tropecientas cartas me tiene encandilado.
    Yo aún no lo he comprado porque en realidad acabo de llegar al mundillo y poquito a poco voy haciendo la colección y todavía no le ha tocado al turno a éste, y porque estaba convencido de que alguna editorial lo traería en castellano, pero habiendo pasado ya un año, y confirmándome a través de 5mpj y twitter la gente de Edge, Devir y Ludonova que no tienen planes de traerlo, ya lo descarto y pienso en el tema de las tradumaquetaciones, que me da un poco de palo por la pereza de pedirlas, que no lo he hecho nunca y temo hacerlo mal, y sobre todo porque intuyo que se notará la definición de las imágenes. Estuve viendo unos pdfs en la bsk donde trataban el tema de la tradumaquetación y me dio la impresión de que la resolución se quedaba corta y que acabarían pixelándose, pero que conste que no es ninguna crítica a la gente que preparó amablemente las tradumaquetaciones, sino más bien que es imposible que lo tengan en mejores condiciones sin tener los archivos editables. ¿Qué me puedes decir de ésto? ¿Se nota que es un apaño un poco casero o pasa por una calidad casi profesional?
    En fin, iMisut, que aunque me olía desde hacía unos días que te estabas amotinando contra el Ser Supremo, siempre tuve la fe de que encontraras de nuevo el Camino. Rezaré por ti. Estoy seguro de que Él sabrá perdonarte. Y si no corriges tu desvío, que el martillo de Legend recaiga sin piedad sobre ti!

    Felices fiestas, tío. Un abrazo.

    1. Jajaja, Enorme!

      A ver, el juego, enfocado como algo meramente táctico y centrándote en intentar hacer tu mejor partida es disfrutable. El problema es cuando entramos en el terreno de la competitividad. Y como digo, mi sensación es que el azar tiene mucho mas que decir que el buen hacer. Ejemplos muchos:
      – Por ejemplo, has ido robando unos colores y cuando se lanzan los dados, los valores salen muy bajos, y tu sin pasta. Ya no puedes ir apenas por canales, ni a bajar personajes ni a subir en el ayuntamiento (esto es mas por falta de planificación).
      – O por ejemplo, andas justo de marcadores de amenaza, y no te sale el color de ese marcador del que tienes 2, y en la siguiente tirada, zasca, pierdes algo (y duele bastante).

      Y así unos cuantos. Si entiendes el juego como un solitario y que el ganador de la partida sea algo anecdótico, pues es disfrutable. Pero si la partida es enfocada competitivamente, el azar influye demasiado en tu puntuación como para tener claro el por qué del ganador y los perdedores. Obviamente, me refiero con jugadores de nivel similar. Si hay diferencia entre los jugadores, aunque el azar pese mucho, probablemente el experimentado gane porque no todo es descontrol y caos 😛

      Felices fiestas a ti también men! Tu si que te mereces un sobresaliente! xD

    2. Respecto a lo de la tradumaquetación, obviamente no queda perfecto. Ahí tienes la foto de las cartas. Se pierde algo de calidad, aunque el juego es totalmente jugable con ellas.

    1. El rojo incendiario de mi sello es suficientemente contundente. Sobre todo teniendo en cuenta que los reparto en ocasiones especiales! 😛

    1. Estos viven deso, sacen reseñeros de una partida pa ganar adeptos y q las ENdiroriales les regalen de juegos…

  3. Creo que ya lo habiamos comentado… pero me parece una vuelta de tuerca del Macao… pero hacia atras 🙂
    No me llamaba excesivamente la atencion, pero ahora menos… no se si proponerlo para alguna sesion 🙂

    1. Supongo que lo dices por las cartas. Pero a mi no me recuerda al Macao en absoluto. Macao si es un Feld con todas sus consecuencias. Que sí, que las cartas están ahi para fastidiarte un poco, pero coñe, son controlables. Aquí… Un día lo probamos y a ver si con vuestras expectativas bajas si os mola 😛

  4. Hijo de p*t*, no sé quién eres pero ya he avisado a Imisut de que has pirateado su cuenta y te has colado en su blog para ponerle un suspenso al Brugges, que es un juego bastante bastante bueno.

    ¿Pensabas que no nos íbamos a dar cuenta? ¿Un suspenso a este Feld que es notable de libro? Menudo Fake.

    P.d.: Tu I.P. nos dice que eres de Figueres, misterioso sinvergüenza…

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