Reseña: Ticket to Ride – London

Introducción

¡Bienvenido a la capital mundial de la moda y la música de los años 70! Súbete a uno de los famosos autobuses de dos pisos y recorre las calles históricas de Londres, pasa por delante del Palacio de Buckingham, visita el Museo Británico o escucha las campanadas del Big Ben desde la otra orilla del Támesis…

Portada

Así se nos presenta este Ticket to Ride: London, un diseño de Alan R. Moon, responsable de toda la línea Ticket to Ride y otros títulos como Airlines Europe o San Marco. El juego fue publicado en 2019 por Days of Wonder en una versión en inglés. De las ilustraciones se encargan Cyrille Daujean (Memoir ’44, Quadropolis, Ciudadelas) y Julien Delval (Los Castillos de Borgoña, Macao, BattleLore).

En nuestro país se encuentra publicado por Edge Enterntaiment en una versión en español (el juego es completamente independiente del idioma). Permite partidas de 2 a 4 jugadores, con una edad mínima sugerida de 8 años y una duración aproximada de entre 10 y 15 minutos. El precio de venta al público es de 19,99€. Para esta reseña se ha utilizado una copia de la versión en español de Edge Entertainment.

Contraportada

Importante: si ya conoces el juego y/o sólo te interesa mi opinión sobre el mismo, puedes pasar directamente al apartado de Opinión. Los apartados Contenido y Mecánica están destinados especialmente a aquellos que no conocen el juego y prefieren hacerse una idea general de cómo funciona.



Contenido

Dentro de una caja de cartón de dos piezas (tapa y fondo), de dimensiones 20×20×4,3 cm. (caja cuadrada pequeña de dimensiones similares a las de Billabong), encontramos los siguientes elementos:

  • Tablero de Londres (de cartón)
  • 68 Buses (17 de cada color) (de plástico)
  • 64 Cartas (45×68 mm.):
    • 44 Cartas de Transporte
    • 20 Cartas de Billetes de Destino
  • 4 Marcadores de Puntuación (1 de cada color) (de plástico)
  • Reglamento
Contenido

Mecánica

Ticket to Ride: London es una versión reducida del clásico de Alan R. Moon perteneciente a la serie iniciada por Ticket to Ride: New York. Un mapa con rutas de 1 a 4 segmentos y una mecánica sin apenas variaciones, con los jugadores teniendo que obtener cartas de colores de un suministro para, posteriormente, reclamar rutas descartando grupos de cartas de un mismo color según el indicado por la ruta. El objetivo es intentar completar el máximo número de cartas de destino posible, teniendo en cuenta que cada carta de destino en mano no completada restará puntos en vez de sumar al final de la partida. La novedad mecánica es las localizaciones se encuentran agrupadas en barrios, de forma que, si un jugador conecta todos los puntos de un barrio, recibirá una bonificación en el recuento final.


Conceptos Básicos

Empecemos con el Tablero. Éste muestra un mapa de Londres centrado en las localizaciones más emblemáticas. Estas localizaciones se encuentran conectados mediante trayectos de entre 1 y 4 segmentos. Algunos de estos trayectos son dobles. Cada trayecto tendrá un color concreto de seis posibles, aunque habrá algunos en color gris que no estarán asociados a ningún color. Adicionalmente, algunos de los puntos conectados muestran un círculo con un valor numérico y un color de fondo. Todas las localizaciones que muestran el mismo valor sobre el mismo color forman un barrio. Al final de la partida se obtendrá el valor del barrio como puntos de victoria si se han conectado todas las localizaciones del barrio, que supondrá una bonificación para los jugadores que conecten ese punto. En el mapa también encontraremos una leyenda del valor en puntos de cada trayecto según su longitud, además de un track de puntos de victoria en los márgenes del tablero.

Tablero

Para reclamar trayectos los jugadores deberán utilizar las Cartas de Trayecto. Existen seis tipos de cartas, cada una con un medio de transporte, un símbolo y un color diferencial (azul, rojo, verde, amarillo, negro y naranja). Estas cartas se encontrarán disponibles en un suministro visible, aunque también se podrá robar del mazo. Los jugadores añadirán estas cartas a sus manos para, posteriormente, jugarlas en grupos de cartas de un mismo color para reclamar trayectos. Existe un tipo de carta especial, los Buses de dos plantas, que funcionan como comodín a la hora de reclamar trayectos, pudiendo sustituir a cualquier carta.

Cartas de Trayecto

Para marcar los trayectos reclamados cada jugador dispondrá de un conjunto de miniaturas de buses de su color. El final de la partida se detonará cuando un jugador se quede con menos de 3 buses en su reserva.

Marcadores de Trayecto

Además de los puntos obtenidos mediante los trayectos, los jugadores obtendrán una gran cantidad de puntos gracias a las Cartas de Destino. Estas cartas exigen al jugador establecer una ruta entre dos puntos mediante una cadena de trayectos. Si lo consigue, el jugador recibirá los puntos indicados en la esquina inferior de la carta. Pero si no, el jugador será penalizado con esa misma cantidad de puntos.

Cartas de Ticket de Destino

Por último, para llevar el conteo de los puntos acumulados por los jugadores al reclamar trayectos se dispondrá de unos marcadores de puntuación.

Con esto tenemos suficiente.


Preparación de la Partida

  1. Se despliega el tablero en el centro de la mesa.
  2. Se baraja el mazo de cartas de transporte y se coloca a un lado de la mesa. Se revelan las 5 primeras cartas formando una fila visible.
  3. Se baraja el mazo de cartas de destino y se deja bocabajo a un lado de la mesa.
  4. Cada jugador escoge un color y recibe 17 buses y un marcador de puntuación que se coloca en la casilla de valor 0 del track de puntuación.
  5. Cada jugador roba 2 cartas de cada uno de los mazos (destino y transporte).
  6. De las cartas de destino deberá escoger si se queda con 1 o con las 2. En caso de escoger solo 1, la carta descartada se coloca bajo el mazo.
  7. Finalmente, se escoge al jugador inicial de forma aleatoria.

¡Ya podemos comenzar!

Partida Preparada

Desarrollo de la Partida

Una partida de Ticket to Ride: London se desarrolla a lo largo de un número indeterminado de turnos alternados por los jugadores (comenzando por el jugador inicial y continuando en el sentido de las agujas del reloj).

En cada turno, el jugador activo deberá realizar una de las tres acciones disponibles:

  • Robar Cartas de Transporte: el jugador roba 2 cartas de transporte, ya sea de la fila visible del suministro o del mazo. Si roba de la fila visible, el hueco generado se repondrá inmediatamente con una nueva carta. Como excepción, si el jugador quiere una carta de bus (comodín) que se encuentre en la fila visible, solo podrá robar 1 carta en este turno (si le toca robando del mazo no aplicará esta restricción). Si en cualquier momento hay 3 cartas de bus (comodín) en la fila visible, se descartarán todas las cartas visibles y se revelarán 5 nuevas cartas. Si el mazo se agota, se baraja la pila de descarte y se conforma un nuevo mazo.
  • Robar Cartas de Destino: el jugador roba 2 cartas de destino. A continuación, decide cuales desea mantener, siendo obligatorio escoger al menos 1. Si no quiere las dos cartas, la carta descartada se coloca bajo el mazo de cartas de destino.
  • Reclamar Trayecto: el jugador reclama un trayecto descartando una carta del color correspondiente por cada segmento que conforme dicho trayecto y coloca buses de su color en los espacios correspondientes. Es posible sustituir una o varias cartas del color apropiado por buses (comodines). Si un trayecto es gris, el jugador podrá escoger el color del grupo (pero todas las cartas deberán seguir siendo del mismo color). Si se trata de un recorrido doble y ninguno reclamado de los dos ha sido reclamado, el jugador podrá escoger el color de uno de los recorridos. Si ya hay alguno ocupado, solo se podrá utilizar el del color no reclamado.
    • En partidas a 2 jugadores solo se podrá utilizar una de las opciones en trayectos dobles.

Tras esto, el turno pasa al jugador de la izquierda.

Detalle Trayectos

Fin de la Partida

El final de la partida se detona cuando, al final del turno de un jugador, a este le restan 2 o menos buses en su reserva personal. Todos los jugadores disfrutarán de un turno final, incluido aquel que forzó el final de la partida (será el último en jugar). Tras esto, se procede a la evaluación final. Cada jugador anota a los puntos ya acumulados:

  • Se suman los puntos indicados en las cartas de destino que se hayan completado.
  • Se restan los puntos indicados en las cartas de destino que no se hayan completado.
  • Los puntos de un barrio cuyos puntos estén conectados por trayectos de un jugador.

El jugador con más puntos será el vencedor. En caso de empate, el jugador con más cartas de destino completadas será proclamado ganador. Si el empate persiste, los jugadores comparten la victoria.

Detalle Puntuación

Opinión Personal

Parece que a Days of Wonder no le ha ido mal con estas nuevas versiones reducidas de su buque insignia y han decidido seguir con otra de las ciudades más importante del mundo. Si con el juego que inauguró la serie se optó por New York, ahora le toca el turno a Londres.

Si ya os leísteis la tochorreseña de Ticket to Ride: New York, ya os advierto que las diferencias entre ambos títulos se reducen al detalle que proporciona puntos extra y a la ciudad en la que se centra el juego. Es por eso que esta tochorreseña la trataré como si fuese una expansión, pues todo lo dicho en su día es totalmente válido, centrándonos en los detalles que diferencian ambos productos.

Pero como alguno de mis lectores son un poco perezosos, recordaros que la gran virtud de estos juegos es lograr haber transformado a un diseño como es Ticket to Ride en un pasatiempo de quince minutos de duración y que puedes sacar en cualquier sitio. Una píldora de uno de los diseños de la Santísima Trinidad de la iniciación. ¿Su mayor defecto? Pues que se queda en una muela (aunque para muchos jugadores esto es una virtud).

Así que lo primero que hay que tener muy claro es lo que ofrece este título: partidas cortas a ritmo frenético en las que apenas hay margen de maniobra y un error suele resultar fatal. Si queréis algo con más desarrollo o que admita cambios de rumbo durante la partida, dejad esta serie de títulos a un lado, porque os decepcionará.

Detalle Trayectos

Centrémonos en el título que nos ocupa y en las diferencias con la versión «anterior» de esta serie. La más reseñable es la correspondiente al elemento «original» del mapa, esto es, los barrios. En el mapa encontraremos que cada localización tiene asociada un valor numérico con un color de fondo ligado al valor. Todas las localizaciones con un mismo valor-color conforman un barrio y proporcionarán dicho valor como puntos de victoria al final de la partida a todos los jugadores que hayan interconectado dichos puntos entre sí. No basta con haberlos alcanzado con algún trayecto, sino que se tendrá que haber creado una línea de bus que pase por todas esas paradas.

El valor del barrio estará dependerá de lo complicado que resulte realizar esta interconexión. Así, tenemos el barrio más asequible compuesto por Covent Garden y el British Museum que requiere únicamente un trayecto de un segmento (regalado) aunque solo proporcionará un punto, mientras que el más complicado es el que requiere conectar Hyde Park, Baker Street, Regent’s Park y King’s Cross, con un trayecto de 4 (de los más largos del mapa), uno de tres y otro de dos, recompensando al jugador con nada más y nada menos que cinco puntos (más que muchos de los tickets de destino).

Este elemento adicional me gusta especialmente, porque añade un poco de salsa a la hora de planificar las rutas que vamos a establecer según nuestros tickets. A veces convendrá no intentar establecer una red completamente conectada, sino diversificar por barrios. Si lo comparamos con la bonificación de un punto de los sitios de interés de New York, en este caso me decanto por el del juego que hoy nos ocupa por ser ligeramente más exigente. En el mapa de New York simplemente se regalaban puntos sin más requisito que conectar la localización con un trayecto. Aquí hay que trabajarse un poco más los puntos.

Detalle Cartas de Trayecto

Probablemente por este motivo en Ticket to Ride: London se incluyan dos piezas más por jugador que en New York, de forma que los jugadores dispondrán de algún turno más en comparación. No es algo que sea apreciable realmente, pues también los trayectos son, en general, más largos en este London, por lo que se deja un poco más de margen a la hora de competir por ellos (hacen falta más cartas). En New York solo teníamos un trayecto de 4 segmentos, mientras que aquí tenemos hasta 4. Y en trayectos de 3 segmentos ahora tenemos 9, mientras que en La Gran Manzana solo se llegaba a 6. Con todo, no se aprecia que la duración haya aumentado, seguramente porque se sigue jugando a la velocidad del rayo.

En London se vuelve a disponer del clásico track de puntuación. Si venimos de New York, lo más normal es que procedamos de igual forma, esto es, dejar los trayectos sin puntuar hasta que se detone el final de la partida y se resuelva todo el proceso de una vez. Si venís de algún juego básico de los de más enjundia, pues mi consejo es que no perdáis tiempo en anotar los puntos, porque la cosa siempre queda muy igualada y al final vais a acabar recontando para aseguraros de que todo está contabilizado. Lo importante es que se prescinde del bloc de notas y de tener que escribir (aunque con alguna aplicación para dispositivos móviles se resolvía el asunto).

Por no dejar sin comentar los habituales aspectos de escalabilidad y rejugabilidad, es, probablemente, estos títulos de corta duración de la saga Ticket to Ride son los que mejor funcionan a cualquier número de jugadores gracias al uso de los trayectos dobles y a no dar tregua a los jugadores, evitando el clásico marcaje entre los contrincantes y el mantener las intenciones ocultas lo más posible mientras se acumulan cartas para empezar a reclamar trayectos uno tras otro. Esta estrategia no es una opción en este caso porque, cuando nos queramos dar cuenta, ya está todo el pescado vendido. Y el mazo de tickets es amplio como para que nos toque una misma combinación en dos partidas más o menos cercanas en el tiempo. Además, como dura tan poco, aquí si es una opción realista el encadenar varias partidas.

Detalle Trayectos

Y no hay mucho más que destacar. Como he dicho al comienzo, prácticamente todo lo dicho en la tochorreseña del primer juego de esta serie es aplicable a London con la excepción del añadido de los barrios. Si solo estáis interesados en tener un título de la serie, este London me parece muy ligeramente más interesante, aunque creo que, al final, pesará más la ciudad en la que se ambienta el juego. Por supuesto, si el gen coleccionista forma parte de vosotros, acabaréis adquiriendo los dos y los que lleguen. Y también considero que es una opción estupenda para regalar a jugadores ocasionales y/o amantes de la capital británica.

Solo queda esperar a ver cuál es la siguiente ciudad en ser agraciada con su propio juego Ticket to Ride. Me arriesgo con Roma o París (apostando sobre seguro), ya que ambas cumplen el requisito de ser una gran capital y disponer de suficientes puntos emblemáticos como para crear un mapa reconocible, aunque faltaría encontrar el medio de transporte característico (me viene ahora Venecia a la cabeza y que pongan vaporettos).

A nivel de producción se mantiene el estándar de Ticket to Ride, con los marcadores de plástico para los trayectos como el elemento estrella (en este caso los característicos buses de dos plantas), unas cartas de buena calidad con un gramaje optimo, textura en lino y una respuesta elástica adecuada. Como siempre, recomiendo el enfundado ya que las cartas están en constante movimiento y se barajan bastante. Y el cartón del tablero tiene un grosor aceptable. Como detalle a resaltar, el relieve de la Union Jack en los marcadores de puntuación. El reglamento es claro y no deja lugar a dudas.

Detalle Tickets

Tal vez el punto en el que London se vea superado por New York es en el acabado del mapa. Mientras que el de New York estaba repleto de pequeñas ilustraciones de los monumentos emblemáticos, aquí lo mucho que encontramos son referencias sutiles. A mí me habría gustado mantener el estilo, y encontrar pequeñas ilustraciones del Big Ben, Trafalgar Square, King’s Cross o del British Museum. Pero bueno, habrá que conformarse con el sello de la Reina Isabel II o el ticket de Sherlock Holmes. A cambio, me gustan los guiños en las cartas de trayecto, con ese submarino amarillo por los Beatles, el coche cohete en honor a Elton John o el clásico taxi británico.

Y vamos cerrando. Ticket to Ride: London sigue la línea iniciada por Ticket to Ride: New York ofreciéndonos una versión reducida a la mínima expresión del clásico de Alan R. Moon, consiguiendo un filler efectivo y muy resultón. Si buscáis una experiencia con algo de desarrollo, estos no son vuestros juegos. Pero si buscáis una píldora de entretenimiento que capture la esencia de Ticket to Ride, estos juegos funcionan más que bien. Dentro de la serie de, de momento, dos juegos, este London me parece ligeramente más interesante por el concepto de los barrios, aunque visualmente es algo más pobre que el ambientado en La Gran Manzana. Por todo esto le doy un…

Notable

8 comentarios

  1. Hola,

    A mi también me habría gustado ver pequeñas ilustraciones de Londres. Pero bueno, está bien el marcador de puntos en el mapa (así nos quitamos de libreta y el boli).

    Gracias por la reseña señor!

  2. Hola!

    en casa tenemos el de New York y funciona muy bien para días que hay poco tiempo, entre juegos más grandes o hasta que empieza la peli/serie de turno. Este me llama mucho la atención pero quizá resulte demasiado parecido, ¿cual es tu opinión de la versión express (ahora solo está en francés, hablaba bien de él Yol de analisis al cubo), teniendo el de NY merece más la pena el de Londres o la versión Express? Lo has probado? Sabes si saldrá en español?

    Gracias!

    1. Tengo el express y tiene algo un poco mas de desarrollo que estos de London o New York. El Express la partida a 2 se te va a la media horita y tiene mas margen. Este London es casi un calco del New York, salvo el detalle de los barrios. Si no es porque los colecciones, con el New York tienes suficiente.

  3. Para un jugador que nunca tocó un Ticket to ride, ¿es mejor ir por los clásicos o por estas versiones para sumar a la ludoteca?

    1. Hombre, estas versiones son peculiares. Tienen la ventaja de que se juega en 15 minutos. Pero como juego mejor uno de los clásicos.

  4. Son independientes del Ticket to Ride clásico o es necesario tener ese para jugar a estos otros (Londres, Amsterdam…).
    Es que en algún sitio he leído que son como expansiones y no me fio.

    1. Son juegos independientes. Yo las trato como expansiones a la hora de analizarlas en el sentido de que lo básico de los juegos se mantiene. No tiene sentido analizar el core del juego en cada uno de ellos. Pero estos juegos ambientados en ciudades son juegos independientes (New York, London, Amsterdam, San Francisco y ahora Berlin).

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