Crónicas Jugonas: Semana 6 del 2015 (02/02 – 08/02)
Vamos, primera semana completa de Febrero y manteniendo el ritmo. De nuevo, partidas todos los días, aunque esta vez han sido la partidita del descanso para el café quien más ha tirado del carro.
El lunes comenzamos con un Coup tras el gran sabor de boca que nos dejó la semana anterior. Un juego diseñado por Rikki Tahta que podríamos definir como la fusión entre Ciudadelas y Bang! Un juego con roles ocultos variables y habilidades especiales y con mucho faroleo. Intentaremos deshacernos del resto de nuestros rivales y ser el único que sobreviva en la partida. Echamos cinco partidas (se notaba que era nuestra última semana en la empresa). En la mesa éramos Enrique, Diego, Aurora y yo. De nuevo, igual que la semana anterior, las victorias nos las repartimos entre Diego y yo. Enrique el pobre cada vez que desafiaba a alguien salía escaldado. Y Aurora se la jugó un par de veces, aunque tuvo mejor suerte que su compañero. Desafortunadamente no le dio para anotarse ninguna partida. En el tanteo global, Diego ganó en 3 mientras que yo me proclame vencedor en 2. Un grandioso juego. Como he dicho, toma lo mejor de Ciudadelas y de Bang!, ofreciéndonos un juego con roles ocultos, habilidades especiales y muchísima interacción. Además es infinitamente más ágil que el juego del salvaje oeste, de forma que, aunque haya eliminación, la partida se resuelve en un periquete y no hay opción a que se alargue, porque siempre van entrando monedas en juegos y cuando un jugador alcance las siete está en disposición de pegarle un palo a un rival.
Solo mi cara de Póker rivaliza con la de Diego |
Tras el almuerzo, Enrique y yo sacamos el Hive para reposar la comida. Diseñado por John Yianni, nos encontramos ante uno de los mejores juegos abstractos a los que he jugado. Una especie de ajedrez con bichos donde el tablero lo forman las propias piezas hexagonales (cada una con un tipo de movimiento distinto). Una regla fundamental: la colmena no puede separarse en ningún momento. Enrique jugaba con negras mientras que yo iba con blancas. Partida tensa y larga, que se decidió en los últimos movimientos. Yo tenía todo bajo control, pero un pequeño paso en falso que permitió a Enrique bloquearme un escarabajo vital hizo que mi castillo de naipes se derrumbase. A partir de ese momento Enrique tomo la iniciativa, con más piezas por introducir en el tablero y llevándose la victoria. Si os gustan los juegos abstractos o disfrutáis con el ajedrez y/o las damas, probad esta maravilla. Además en su versión pocket es muy asequible económicamente. A mí me parece un must have.
Tanto remar para morir en la orilla |
El martes me llevé para el descanso el incombustible Un Imperio en 8 Minutos. Para el que no lo conozca, es un juego de Ryan Laukat con mecánica de mayorías reducido al mínimo, con cartas de acción que, a su vez, sirven para un set-collection final. De nuevo éramos cuatro, Aurora, Enrique, Diego y el que os escribe. Partida complicada, con buenos movimientos por parte de todos los jugadores. Extrañamente, en esta ocasión Enrique y yo apenas entramos en conflicto. A las primeras de cambio el decidió cruzar el océano y establecerse en otro continente, dejándonos el principal al resto de jugadores. Yo hice todo lo contrario, intentar centrarme en el continente principal, aunque tuve oportunidad de expandirme a uno de los exteriores para anotar unos puntos que se antojarían vitales. Esta fue una de las claves de mi victoria. La otra, el poder concentrar todas mis cartas de acción en dos únicos tipos de mercancías. Resultado final: victoria para el que os escribe con 14 puntos, segunda Aurora con 11, tercero Enrique con 9 y Diego ultimo con 8. Una maravilla de filler ideal para estos momentos, aunque puede saber a poco si se saca en una sesión más pausada. Pero bueno, para eso existe El Grande.
Dos tipos de mercancías y buena expansión |
De nuevo, al igual que el día anterior, unas partiditas al Hive con Enrique para reposar el almuerzo. En esta ocasión disputamos tres partidas, ya que las dos primeras fueron increíblemente rápidas. En la primera yo iba con Blancas y Enrique con negras, llevándome yo la victoria. En la segunda Enrique iba con blancas y yo con negras. Un error crucial en la apertura permitió a Enrique llevarse la victoria en pocos movimientos. Finalmente, en la tercera, yo de nuevo con negras y Enrique con blancas si fue una partida de esas a las que estamos acostumbrados, con prácticamente todas las fichas en juego. Y esta vez la victoria fue para mí.
Dulce venganza |
El miércoles me llevé el Carcassonne, añadiéndole la expansión de Posadas y Catedrales. Un juego de Klaus-Jürgen Wrede en el que, mediante la colocación de losetas, iremos formando Carcasona. Los jugadores, en su turno, roban una loseta y la colocan de forma coherente sobre la mesa, pudiendo colocar un meeple sobre ella para intentar completar una estructura con la que puntuar (caminos, castillos o claustros, además de los granjeros). La norma más importante es que no se puede colocar un meeple en una estructura en la que ya haya alguno otro, de forma que solo se podrá intentar arrebatarla mediante una incorporación indirecta (comenzando otra estructura del mismo tipo y contándolas). Partida con estrategias muy diversas. Enrique se obsesionó con los granjeros y esto fue su perdición. Diego intentaba rascar de donde podía, mientras que Aurora iba un poco a ciegas. Yo intenté centrarme en ciudades grandes. Viendo que el campo principal era claramente de Enrique, me centré en intentar anotar el máximo de puntos posibles con granjeros. Además, al final, el campo central no proporcionó tantos puntos como se esperaba. Esto sería lo que me daría la victoria. Resultado final: yo 73 puntos, Enrique 69, Diego 65 y Aurora 59. Pasarán eones y Carcassonne seguirá siendo una magnifica puerta de entrada a este mundillo, con la gran virtud de que seguirá deparando grandes momentos cuando vuelva a la mesa, incluso cuando tengamos una colección que sobrepase la centena de títulos.
Victoria ajustada |
Por la noche Sandra y yo jugamos nuestra primera partida de la semana. Y, como no podía ser de otra forma, un estreno: Saint Malo. Un juego diseñado por Inka Brand y Markus Brand en el que tendremos que desarrollar la fortaleza más prospera y capaz de soportar el ataque de los piratas. Un juego de dados al más puro estilo Yahtzee en el que iremos dibujando las estructuras que creamos convenientes en nuestro tablero. La partida comenzó muy de cara para Sandra, que gracias a los Nobles y a un par de Juglares logró destacarse. Yo no me puse nervioso y me centre en intentar hacer acopio de dinero para poder tener algo más de control sobre mis tiradas. Posteriormente construí tres casas mediante un arquitecto y complete una serie completa de iglesias, además de edificar todos los muros y rechazar todos y cada uno de los ataques de los piratas, cosa que Sandra no pudo conseguir en los últimos turnos. Esto fue clave para que la victoria cayese de mi lado. Resultado final: 43 a 38. La verdad es que la mecánica de juego no es muy original en el sentido de que ya hemos visto unos cuantos juegos así. Lo que sí que le da un toque especial es la libertad y variedad de construcciones, pudiendo ir a bastantes estrategias. Y el tema de los piratas es un punto. Hay que tener un ojo en el tablero central para prepararse bien. Lo mejor es que podemos ser muy malvados e invertir dinero en fijar caras que desaten el fuego enemigo si vemos que nuestro rival no está preparado. Muy decente.
Euro-Pictionary |
El jueves me llevé para el descanso del café el mítico Ciudadelas. Un juego diseñado por Bruno Faidutti en el que se mezcla gestión de la mano con habilidades especiales y roles ocultos. Uno de esos títulos que ha servido como punto de entrada al mundillo para muchos. Éramos cinco: Jaime, Aurora, Enrique, Diego y el que os escribe, y jugamos a 6 cartas para evitar que la historia se alargase mucho. De nuevo partida muy igualada, aunque esta vez todos los jugadores afinaron mucho. Y, de nuevo, partida en la que no logré construir un edificio de cada distrito, lo que me habría dado la victoria, que fue para Jaime. Resultado final: Jaime 20 puntos, yo segundo con 18, tercera Aurora con 16, cuarto Enrique con 14 y último Diego con 12. Como he dicho, uno de los clásicos y, probablemente, el más conocido del autor francés. Es posible que haya muchos juegos que, basándose en sus mecánicas, ofrezcan una experiencia más enriquecedora, pero para mí ocupa un lugar especial en mi ludoteca.
Me faltaron distritos |
El viernes, último día en el curro (hoy comienzo en una nueva empresa), me llevé Félix, El Gato Encerrado. Un juego diseñado por Friedemann Friese que se inspira claramente en el Póker, pero huyendo de las complicadas combinaciones de cartas para apostar por una serie de lotes con adorables gatitos (y otros animales) que suman o restan puntos. Al final de la partida, el jugador con más puntos (contando los ratones/monedas) será el vencedor. Éramos cinco: Aurora, Enrique, Jaime, Diego y el que os escribe. Como suele ocurrirme en este juego cada vez que lo enseño, partida desastrosa. El primer lote que me comí me endosó 11 puntos negativos. Y a partir de ahí, a remar. Enrique decidió que era mejor ir sobre seguro, y era casi siempre el primero que se tiraba de la ronda, rapiñando los dos ratones. Además, pudo apostar a lo grande en el mejor lote de la partida, lo que le dio la partida, aunque Jaime quedó a un solo punto. Resultado final: Enrique vencedor con 55 puntos, Jaime segundo con 54, Diego tercero con 31, Aurora cuarta con 28 y yo ultimo con unos tristísimos 22 puntos. Como digo, es de esos juegos que consigue atrapar el alma del Póker y logra hacer sentir que te juegas algo en las apuestas sin necesidad de que haya dinero de por medio. Además con gatitos adorables. ¿Qué más se puede pedir?
Soy un negado en este juego |
El sábado, antes de ir a dar una vueltecita, Sandra y yo sacamos el Pelican Bay. Un juego diseñado por Jacques Zeimet al que un horrendo reglamento en su primera edición le hizo mucho mal. Yo me he pillado la segunda y la cosa mejora muchísimo. Se trata de un título de colocación de losetas en el que iremos ampliando zonas y puntuándolas, a la vez que vamos bloqueando posibles posiciones que interesen a nuestros rivales para evitar que anoten de forma importante. Además, si cerramos áreas, repetiremos turno, adquiriendo unos pelícanos que otorgan puntos extra al final de la partida. Pero estos son limitados, así que una vez que todos estén en juego, los jugadores se los irán robando unos a otros. Partida dominada de cabo a rabo por un servidor. Cerrando bien los huecos, intentando evitar que Sandra me capturase algún pelícano (todos estaban en mi poder). Esta fue la clave de mi victoria, ya que, a pesar de tener controlada la situación, no lograba abrir una brecha importante. Y hasta el último turno todo puede cambiar, aunque no fue así en esta ocasión. Resultado final: 174 a 130. Una edición preciosa y una mecánica de colocación de losetas muy interesante. Cuesta pillarla un poco al principio pero, una vez que se domina, es un juego muy entretenido. Eso sí, genera un Análisis-Parálisis brutal, así que creo que no lo sacaré jamás con más de dos jugadores. Es ideal para echar una partida relajada, sin tener que estar mirando el reloj, pensando bien donde colocar. El tema le va que ni pintado. Dejar pasar el tiempo tumbado en la bahía del pelícano viendo cómo se pone el sol.
En la bahía soy el rey |
Para intentar quitarse el mal sabor de boca, me sacó el Noah, diseñado por Bruno Cathala y Ludovic Maublanc. Un juego de cartas en el que tendremos que ir creando series de animales según su género (alternado o del mismo) cumpliendo una restricción de peso máximo. Se juegan tres rondas en las que intentaremos quedarnos sin cartas. Los jugadores van anotando los puntos correspondientes a la tristeza que le provoca a Noé el no haber podido salvar a esos animales. De nuevo, partida claramente dominada por un servidor, aunque en las tres rondas Sandra estuvo a punto de cerrar. Pero gracias a mis hábiles movimientos lograba salvarme en el último momento, para ser yo el que finalizase la ronda. En la tercera llegaba con una buena ventaja, así que opte por un juego más conservador, intentando dejar que fuese ella la que cerrase con la intención de controlar cuantas lágrimas iba a anotar. Afortunadamente logré limpiar mi mano y, aun perdiendo esa ronda, no anoté lágrimas. Resultado final: 0 lagrimas para mí por 6 lágrimas para Sandra. Noé y yo colegas para siempre. Con un aspecto infantiloide, encierra un juego que te hace pensar, con una buena componente de memoria y de saber cuándo jugar ciertas cartas para intentar sacarle el máximo rendimiento. Muy recomendable.
Remontadas épicas |
Para cerrar la semana, el plato fuerte. Ciro se vino a casa para estrenar uno de los juegos del momento: Time of Soccer, diseñado por nuestro querido compañero de Lipschitzz. Un manager de fútbol en el que tomaremos el control de un equipo y a lo largo de una temporada intentaremos hacernos con la victoria tanto en la liga como en la copa. Muchos lo comparan con un pequeño juego de civilizaciones, y la verdad es que los conceptos están ahí: felicidad, recursos, niveles de ataque y defensa, puntos de acción para adquirir mejoras, enfrentamientos directos, un puntito de azar. Al principio comenzamos un poco despacio. Son muchos elementos a controlar. Especialmente tedioso el tema de calcular los niveles de ataque y defensa. Es necesario una calculadora cerca para agilizar el proceso. Una vez salvado este pequeño escollo, la verdad es que es toda una experiencia. Yo logré desarrollar un equipo más o menos equilibrado, intentando que mis niveles de ataque y defensa fuesen más o menos parejos. Para ello intente armar un equipo completo lo antes posible para eliminar los hándicaps por jugadores inexpertos. Ciro y Sandra tardaron en hacer esto, por lo que en las primeras jornadas conseguí abrir un pequeño hueco que no fueron capaces de limar. La copa también acabo en mis vitrinas, con un primer enfrentamiento con Ciro que se decidió por detalles. Sandra cayó a las primeras de cambio con un equipo neutral. Resultado final: yo vencedor con 48 puntos, Sandra segunda con 37 y Ciro último con 29. La verdad es que el juego me ha parecido una maravilla. Todo encaja a la perfección y de verdad parece un pequeño PcFutbol llevado a tablero. Obviamente, si hubiese licencia de por medio tendría mucho más tirón, pero poder alinear a colegas del gremio también tiene su punto. Sin duda el punto flaco del juego es el sistema de niveles, que hace que tengamos que estar con una calculadora para anotar los distintos niveles. Y no es sencillo cambiar de táctica. Habrá que inventarse algún sistema para agilizar este proceso. Una hoja Excel, una libreta o una aplicación para dispositivos móviles. Pero es lo que más ralentiza el juego. Aun así, me parece un gran desarrollo. Otro gran juego de origen patrio que supera expectativas.
Ya estoy sacando el autobús para celebrar el doblete |
Y con esto termina la semana. Como habéis visto, muchas partidas en los cafés. Se notaba que era nuestra última semana. Supongo que esta primera en el nuevo sitio será mucho más relajada en cuanto a partidas se refiere. Pero bueno, yo los echo en la maleta…
bot al que me enfrentaba siendo infinitamente superior, bot con el que perdía, la suerte ayer no estuvo de mi cara, que inyustisia 🙁 Sin embargo a ti te gané un partido y te empaté otro… malditos dados! XD Como se ve en las crónicas, esta no fue mi semana…
Lloras como CR7 :p buaaaa buaaa :p
Tengo mi copia de Time of Soccer pendiente de estreno. Pero a una parte de mí le da pereza jugarla, ya que siempre me digo "espera a jugarlo con Lipschitzz" que fijo te lo pasas mejor xD
Y ahí sigue.
¿Lo has jugado en solitario?
En solitario no, pero no creo que la experiencia varíe mucho, ya que aun jugando 1, 2, 3 o 4, siempre hay bots en juego. El juego solo es interactivo en los partidos entre jugadores, en los que es importante saber como juega y en la lucha por las losetas (que aquí si hay bastante interacción indirecta).
Una semana muy de dos jugadores, como las que teníamos nosotros cuando jugábamos…antes de entrar en la sequía que estamos ahora…!!
A ver si con la semana blanca vuelven las partidas y, de paso, llega también una reseña del Time of Soccer, que está en nuestro punto de mira.
A seguir jugando!
Si, esta semana, quitando las partidas del café y el domingo con Ciro, casi todo entre Sandra y yo. Esta primera semana en el nuevo curro no he jugado tanto, pero ya he ido sacando cositas 😛
Muy buenas Iván:
Decirte que ya nos llegó el Hive Pocket y ya le echamos unas partidas. Tenías razón, es un completo acierto y la edición pocket está super bien. Las piezas son super chulas y el tema de la bolsita de viaje es un punto. Eso sin contar que te viene ya con las expansiones de la mariquita y el mosquito.
Seguro que será unos de nuestro juegos habituales 🙂
Un saludo!
Y cómo se hace para jugar por ahi?? No tengo ni idea de qué es! 🙂
Magnífico! A ver si echamos alguna por la BGA!
Es un portal online. Tiene muchos juegos, entre ellos, el hive!
Hola Iván!
Ya pude jugar un par de partidas al Hive en la BGA. Una victoria y una derrota contra un hungaro que me hundió en la miseria, jeje. Soy demasiado novato todavía. Me parecía bastante guay la web. Hay muchos juegos!!
Hola Iván! Tengo echado el ojo a un Saint Malo en edición Multilingüe y, si no me equivoco, es la edición que tú tienes. Según tengo entendido, los componentes aparecen en alemán por un lado, y en inglés y francés por el otro. ¿Es demasiado farragoso el tener dos idiomas juntos o se puede jugar sin problemas? Muchas gracias y un saludo!!
Es una simple referencia para recordar lo que hacen los distintos personajes. Una vez que los usas una vez, ya ni tienes que consultarlo. No lo veo para nada farragoso, ni dependiente del idioma. De todas formas, siempre puedes imprimirte una pequeña hojita de ayuda para cada jugador y no tener que recurrir al tablero en caso de duda. Saludos!!
Ok! Muchas gracias por tu respuesta! Saint Malo en camino!